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ITALIA

"La Juve perdonó a Cristiano y ahora castiga a Arthur, McKennie y Dybala"

El lío por la cena en casa del estadounidense provoca la enésima polémica de este curso para la Juventus. ‘La Repubblica’ subrayó la diferencia de trato con el exmadridista.

 Juventus - Lazio Julio 2020
Juventus - Lazio Julio 2020ISABELLA BONOTTOAFP

La cena en casa de Weston McKennie con Arthur, Dybala, sus novias y unos amigos (los carabinieri pillaron a 10 personas e identificaron a seis), le pasará factura a los tres bianconeri. Además de las multas que llegarán desde las autoridades, la Juventus está valorando una sanción y, además, dejará a los tres fuera de la convocatoria para el derbi de mañana ante el Torino.

Una reacción muy dura, acertada según la mayoría de los tifosi, enfurecidos por lo ocurrido, pero que también causó polémicas. 'La Repubblica', por ejemplo, subrayó la diferencia con las medidas "suaves" para evitarles castigos a Ronaldo, "que a menudo pasó totalmente de las reglas que valen para todos los mortales".

El exmadridista, de hecho, no sufrió consecuencias "por los insultos al entrenador, gestos vulgares hacia los hinchas rivales, participar a varias fiestas de cumpleaños durante el confinamiento en Madeira, pasar un romántico fin de semana fuera de la región Piamonte durante el confinamiento y organizar cenas de nochevieja". Según el periódico, "hasta que la Juve ganaba se cerró un ojo que ahora está muy abierto, ya que los problemas se suman uno tras otro".

El 'Corriere dello Sport', por su parte, hizo una lista del "annus horribilis" bianconero, que comenzó con el absurdo escándalo por el examen farsa de Suárez, la catarata de lesiones (De Ligt, Dybala, Alex Sandro, Chiellini, Demiral, Cuadrado), las polémicas por el Juve-Nápoles (que, por fin, se jugará el miércoles), Cristiano que rompió el confinamiento, las derrotas que alejaron el scudetto y el enésimo ridículo en la Champions, antes del último lío en casa McKennie.

Un año para olvidar que todavía no ha terminado. Con el scudetto ya inalcanzable tras nueve años de hegemonía, toca defender la clasificación a la Champions. Hay que cambiar el rumbo partir de mañana, en el derbi con el Torino, sin Demiral y Bonucci (positivos en covid), ni los castigados Dybala (que por fin estaba listo), Arthur y McKennie.