Borja Iglesias: "Me quité un peso, rompí una barrera mental"
El delantero del Betis celebra su buen momento, halaga a Pellegrini y a Canales y advierte: "Estoy cada día más cerca de mi mejor versión".
La temporada de Borja Iglesias (28 años, Santiago de Compostela) fue de menos a más y se convirtió en una pieza decisiva en la candidatura europea del Betis desde su despegue en diciembre. Ocho goles en menos de mil minutos para vislumbrar al menos un atisbo de la mejor versión del delantero gallego.
El Betis está sexto. ¿Europa es una obligación?
A nivel de club es el objetivo que se tiene que marcar, a nivel de plantilla también. Pero cada temporada es un mundo.
Todo cambió desde enero.
Pero ya en diciembre competíamos a un nivel muy alto, aunque en enero comenzamos a ganar más. Cuando entras en una buena dinámica, todo es más sencillo, sobre todo porque se lucha por cosas.
Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
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Próximos partidos |
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El plantel es casi el mismo del año pasado. Pero con Manuel Pellegrini...
Creo que todos dimos un paso adelante, el técnico puso las bases que consideraba para luchar por estos puestos.
¿Pero algo cambió?
Se juntan muchas situaciones, la realidad de la plantilla es que hay que luchar por estos puestos y estar a este nivel. Nosotros queremos dar ese paso adelante, sabemos a quien representamos.
¿Hasta qué punto influía lo psicológico en tu falta de gol?
Todos me ayudaron cuando peor lo pasé, a nivel psicológico también me ayudaron. A veces quieres disfrutar sobre el campo y no toca. Pretendes estar en situaciones de éxito que en ese momento no están presentes. Ahora estoy contento.
Esa aparición ante la Real Sociedad en la Copa. ¿Cómo de decisivo fue ese doblete para lograr alcanzar ahora este nivel?
Cuando vives un momento como ese, estás rompiendo una barrera que se está formando a nivel mental. No era sencillo. Cuando logras eso, el impacto es muy grande. Te quitas un peso. Y así fue. Y entonces aprovechas para trabajar más.
No sé si tus compañeros se alegraron más que tú.
Sí, me sentí muy agradecido. Cuando se alegran tanto o más que tú de tus éxitos, es algo que te alegra mucho. Mis compañeros siempre estuvieron ahí.
Ocho goles en menos de mil minutos. ¿Lo hubieras firmado antes de empezar?
Creo que no. Me hubiese gustado jugar más.
Pero las estadísticas cuentan que siete de esos ocho goles llegaron desde el banquillo.
Es curioso, sobre todo porque nunca había marcado un gol como suplente desde que era profesional antes de esta temporada. Estoy feliz, creo que eso también me hizo romper una situación en la que no me sentía cómodo. Estoy cada día más cerca de mi mejor versión. Te vas enriqueciendo, te vas haciendo mejor en todos los ámbitos.
La competencia es ahora mucho mayor.
Todos estamos muy enchufados. Sabiendo la dificultad que tiene disputar un puesto, se generan siempre situaciones que no son cómodas. Es nuestra profesión, todos están enchufados, es fundamental. Juanmi es un ejemplo... todo lo que pasado es complicado, pero no paró nunca de trabajar y pensó que lo mejor estaba por llegar. Es un futbolista fantástico.
Ante el Levante apareció Fekir con una brillante jugada. ¿Sorprende?
Sorprende poco porque lo vemos todos los días. Hace eso casi cada día, constantemente. Aunque en el campo luego está muy vigilado por el rival. Pero marca las diferencias.
¿Qué peso tiene Canales en este renacido proyecto?
En un vestuario hay uno, dos, tres capitanes... Pero también hay líderes. Y Canales lo es. No necesita hablar. Es un líder a través de su juego y su hambre de crecer. Nos aporta mucho. Es un talento descomunal, con una capacidad de desbordar, de asistir, de marcar...
¿Y Joaquín?
Es otro líder, es el capitán, le tenemos una admiración inmensa. Juega menos ahora, pero luego entra y es diferencial y gana partidos en quince minutos. ¿Futuro? Lo tendrá que decidir él, ojalá sea así y siga, el próximo y el siguiente. Las fuerzas las tiene.
¿Cuánta falta os hace la afición en las gradas?
Se echa mucho de menos, en momentos complicados sabes que la gente te va a exigir y son momentos más difíciles. Pero la realidad es que con nuestro estadio lleno, es una baza a nuestro favor. En los primeros 20 minutos éramos muy superiores al rival y era en gran parte por ellos. Estamos deseando que vuelvan, es la esencia del futbol. Todo esto es raro.