Haaland enfría a Madrid y Barça
El delantero habló en la concentración de Noruega en Marbella sobre una posible transferencia: "Aún tengo tres años de contrato; no me altero con eso".
Erling Haaland ha vuelto a hablar de su futuro en su concentración en Marbella. El delantero noruego, en la órbita de Real Madrid, Barcelona y otros grandes clubes del continente, recalcó que no es momento de tomar decisiones: "Todavía tengo tres años de contrato, no me altero con eso". Además, junto a Kylian Mbappé es el llamado a ser sucesor de los grandes futbolistas del planeta en la última década. Sin embargo, se mantiene a margen del debate: "Cristiano Ronaldo y Messi... todavía están muy lejos".
El atacante protagonizó una de las imágenes del fin de semana en el duelo que enfrentaba a su equipo, el Borussia Dortmund, contra el Colonia. El noruego marcó dos goles pero veía como, minutos después, el rival empataba el partido. Al descanso se fue enfadado con el equipo, pero su peor momento llegó con el pitido final. Enfiló el túnel de vestuarios sin dirigir la palabra a nadie. Su gesto más feo fue con Jorge Meré, que le había pedido la camiseta durante el partido. Haaland se la quitó y se la lanzó desde la distancia, sin ni siquiera mirarle a la cara o recoger la suya.
En su primer día con la selección noruega, que se entrenará en Marbella durante las próximas dos semanas, ha querido pedir perdón por lo sucedido y explicar la situación. "Estaba muy enfadado tras el partido. Tuve una mala actitud lanzando la camiseta al jugador que me la había pedido. Pido disculpas por ello. Estaba fuera de control por que estaba muy enfadado", aseguró ante la prensa.
Su actitud ha generado un debate. Hay quienes elogian lo sucedido argumentando que Haaland demuestra su alto nivel de competitividad. Por el contrario, los más reticentes aseguran que que hay líneas que no se deben sobrepasar. Su gesto ha dado la vuelta al mundo y ha originado una división de opiniones.