Haaland no puede solo

Jornada muy negativa para el Borussia de Dortmund. El equipo venía de ganar tres de sus últimos cuatro partidos en liga, cayendo 4-2 ante el Bayern, y extendiendo las buenas sensaciones a la Champions donde sellaron su clasificación a los cuartos de final, pero de nuevo, en un partido muy irregular no han podido con el Colonia. El empate sumado a las victorias del Eintracht de Frankfurt y el Wolfsburgo deja al conjunto borusser a cuatro puntos de los puestos Champions y a ocho del tercer clasificado.

El día no pudo empezar mejor para los de Terzic. A los tres minutos Haaland aprovechó un pase en largo de Emre Can para, tras un gran control, batir a Horn. Era su gol número 20 y allanaba el camino a su equipo. A punto estuvo de hacer el segundo Thorgan Hazard rematando una gran jugada hilada entre los jóvenes Bellingham y Reyna. A partir de ahí el Borussia se fue desconectando del partido y dio la posesión al Colonia. Los locales dominaban con una tranquilidad que rompió Haaland en el minuto 30 al casi marcar en una de las pocas contras que fue capaz de montar el Borussia. Poco después un centro de un muy activo Katterbach golpeó en la mano de Bellingham, el árbitro Daniel Siebert no lo vio pero tras una revisión en el VAR, señaló el penalti. Duda no fallaba desde los once metros y ponía justicia en el marcador.

En la segunda parte el guion fue muy parecido. El Borussia entró muy concentrado, dando minutos Terzic al jovencísimo Moukoko el cual ocupó el puesto de Brandt. A pesar del arreón inicial en el que Moukoko dejó algún detalle, el Colonia volvió a hacerse con el balón y en un fallo de Meunier que prolongó un pase que se quedaba corto de Drexler para Jakobs, el extremo fusilaba la portería de Hitz en lo que suponía su primer gol en liga. La ventaja podría haberse visto ampliada de pitar un posible penalti de Emre Can a Drexler, uno de los mejores del partido

Hasta ese momento Haaland había estado completamente desaparecido en la segunda parte pero con el Dortmund echado para adelante y con la entrada del madridista Reinier, el noruego volvió a dar muestras de su excelso nivel. Primero con un remate de cabeza al palo en el 79' a centro de Meunier y luego con un tiro desde la frontal que se marchó rozando la porteria tras un buen pase de Reinier. Finalmente, en el 89' Haaland metía para dentro un centro del canterano Knauff que había entrado poco antes dejando muy buenas sensaciones. El partido murió sin ocasión de que los de Terzic pudiesen llevarse los tres puntos.

El final del partido dejó la imagen de Haaland marchándose del campo claramente enfadado, seguramente no solo por el tropiezo sino por la sensación de impotencia. Las bajas de Sancho (nueve), Guerrero (ocho) y Reus (seis), los tres máximos asistentes dejaron a un Haaland muy solo echando de menos a sus socios habituales. El Colonia se pone a dos del descenso y el Borussia se jugará muchas de sus opciones para entrar en Champions en el próximo partido tras el parón ante el Eintracht, cuarto clasificado.