Trippier recupera su banda
El inglés fue, junto a Koke, el jugador con más pases completados del Atlético ante el Athletic. También el que más recuperó. Su vuelta ha mejorado también a Llorente.
Pocos jugadores pueden sentirse tan contentos por la vuelta de un compañero como Marcos Llorente con la de Trippier. El inglés le ha liberado de tener que actuar como carrilero o lateral derecho y ha recuperado la conexión por la banda derecha que tanto rédito le ha dado al Atlético y con la que se originó el gol de Luis Suárez en el derbi y el penalti forzado y marcado por el uruguayo ante el Athletic.
Que Trippier potencia la banda derecha es indudable, pero es que el equipo ha vuelto a volcar su juego hacia ese costado. El inglés fue, junto a Koke, el jugador que más pases buenos dio en el partido frente al Athletic, los dos con 66. Pese a que tuvo bastante trabajo defensivo por su costado, donde se concentraban las subidas de Yuri con la caída de Muniain y Raúl García, ganó el 71,4% de los duelos cuerpo a cuerpo y acertó en sus tres entradas, recuperando un total de nueve balones, el que más del equipo.
Trippier lo había jugado todo en Liga y Champions hasta que la FIFA le sancionó durante diez semanas sin poder jugar ni entrenar (esto último se corrigió después de la reclamación del Atlético) a raíz de la Federación Inglesa por violar la normativa sobre apuestas en el verano en el que fichó por el club rojiblanco desde el Tottenham. Tras obtener la cautelar y jugar contra el Sevilla, se perdió nueve partidos consecutivos, coincidiendo con el momento de mayor debilidad del Atlético y encajando en ocho de ellos.
Aunque en su vuelta también Real Madrid y Athletic han marcado un gol cada uno a Oblak, la presencia de Trippier mejora al equipo en todas las facetas y potencia a sus compañeros, que siempre tienen un apoyo en el costado para entregarle el balón, abrir el campo cuando están cerrados en el otro costado y tener una solución que aporta en ataque con su buen juego colectivo y visión para los desmarques al espacio. Toda una bendición para Llorente y para Simeone, que con Trippier ha recuperado todo el potencial de su banda derecha.