Buscando a João Félix
Los cambios en el derbi no mejoraron al Atlético. El portugués tuvo 26 minutos, pero apenas completó siete pases y perdió cuatro balones.
EI Atlético no mejoró con los cambios en el derbi ante el Real Madrid. El equipo rojiblanco se estaba mostrando muy superior sobre el campo en la primera hora de partido, presionando arriba, moviendo la pelota con criterio y generando ocasiones, aunque sin conseguir un segundo gol que ampliase la ventaja. Pero con los movimientos de Simeone desde el banquillo, donde probablemente tuvo que ver que Lemar y Carrasco habían llegado a la cita después de superar problemas físicos, no sirvieron para que el equipo siguiese apabullando al eterno rival.
Saúl entró por Lemar a los 57 minutos en un cambio que ya favoreció a que el equipo fuese retrocediendo líneas y João Félix sustituyó a Carrasco a los 64 minutos para intentar mantener la pelota y buscar a la contra los desmarques de Suárez, Llorente o Correa, los jugadores más rápidos del frente de ataque. Carrasco se retiró después de un gran partido, convirtiéndose en una pesadilla para Lucas Vázquez y haciendo mucho daño desde la banda izquierda, donde gozó de un mano a mano que no pudo convertir y estuvo a punto de asistir a Suárez, pero en los dos lances salió vencedor Courtois.
De João Félix se esperan grandes cosas, pero ahora no está a ese gran nivel de inicio de temporada, donde era el canalizador del juego ofensivo del equipo y en los partidos tensos le cuesta entrar con intensidad, algo que le está costando la titularidad. Frente al Madrid tuvo 26 minutos y su aportación fue muy discreta. El equipo tan metido sobre su área no ayudó, teniendo que aparecer más en defensa en el perfil izquierdo, donde le cuesta mucho. Pero en total solo pudo completar siete pases (de ocho intentos) y recuperar un balón por cuatro pérdidas. Ganó el 25% de los duelos y vio una tarjeta amarilla por una falta en la frontal. La competencia en el ataque del Atlético está muy cara y João Félix, que es el segundo máximo goleador del equipo, además de ser brillante con balón, tiene que aparecer más en las labores colectivas.