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REAL ZARAGOZA

Álex Alegría y el 4-4-2

La decisión de JIM de acercar a Narváez al ariete extremeño resultó un movimiento decisivo, unido a la solidez que otorgan Vigaray, Francés y Jair.

Zaragoza
El cabezazo victorioso de Álex Alegría frente al Tenerife.
ALFONSO REYES

Álex Alegría, fichado en el mercado invernal para paliar la incompetencia goleadora de Toro Fernández y de Vuckic, le puso firma a la importantísima victoria del Real Zaragoza frente al Tenerife con un cabezazo marca de la casa y completó su mejor partido, después de seis actuaciones decepcionantes en las que apenas había llegado a situaciones de remate.

El ariete extremeño creció en seguridad y protagonismo gracias a su gol, pero todo partió de la decisión de Juan Ignacio Martínez de ordenar a su equipo en 4-4-2 y de sacar al colombiano Narváez de la izquierda y acercarlo por primera vez a Alegría. Ese movimiento táctico no mejoró sustancialmente el juego del equipo aragonés, porque sin Eguaras y sin Francho era prácticamente un imposible, pero liberó a Alegría de la vigilancia de los dos centrales, le creó muchas dudas e incertidumbre al rival y al final resultó decisivo.

Alegría pidió en las vísperas un compañero para el ataque y JIM, forzado quizá por las importantes ausencias en el centro del campo, aparcó su habitual 4-3-3 y apostó por jugar con dos puntas. “Casi siempre he preferido jugar con otro delantero, pero es más por libertad de movimientos. Normalmente soy el que fija y el que les da espacios a los otros delanteros para que puedan hacer goles. Soy el que atrae a la defensa para que otro aproveche el espacio”, señaló Alegría en un pequeño acto de reivindicación.

Así que JIM hizo de la necesidad virtud y facilitó con el cambio de dibujo la rehabilitación de Álex Alegría, cuyo gol le permitió al Zaragoza volver a levantarse en su agónica pelea por eludir el descenso.

Sin embargo, el partido frente al Tenerife volvió a poner de manifiesto que el Zaragoza tendrá que sufrir hasta el final para conservar la categoría y que todo va a depender en gran medida de que el equipo mantenga la solidez defensiva que mostró este sábado y que sólo se vino abajo frente al Alcorcón y el Oviedo por los dos graves errores de Cristian Álvarez. Y es que entre los centrales Francés y Jair, un dúo imponente, y el lateral Vigaray conforman el trío que está sosteniendo al Zaragoza en los dos últimos meses, porque el equipo de JIM apenas tiene fútbol y sólo Narváez presenta números dignos entre sus atacantes, incluidos los extremos o los medias puntas.

Pero los rivales apenas le hacen daño. El Zaragoza perdió frente al Alcorcón y el Oviedo, pero su puerta se vio escasamente amenazada, y ese es el empeño que el entrenador ha puesto desde su llegada al cargo. “Dejar la portería a cero es lo que nos va a hacer crecer como equipo”, dejo dicho JIM el viernes. Nada que no se supiera, porque el equipo no tiene ataque para ir a un intercambios de golpes, ni para confiar en sus individualidades ante el gol, pero el 4-4-2 propicia un ligero beneficio que hay que se hace imprescindible aprovechar.