El Espanyol, tantos laterales en 90 minutos como en 27 jornadas
Las bajas de Pedrosa y Óscar Gil, la expulsión de Dídac y la búsqueda desesperada del triunfo propiciaron un baile, con Lluís, Cabrera y hasta Puado. Faltó Omar.
Se conjuraron los astros, y no de un modo precisamente positivo, para que el Espanyol-Oviedo fuera una jornada marcada a fuego en una demarcación muy concreta. De hecho, podría reservarse en el calendario de cualquier perico el 5 de marzo como el día de los laterales. Hasta cuatro distintos desfilaron por las bandas del conjunto blanquiazul en el RCDE Stadium en solo 90 minutos. Tantos como habían jugado en las 27 jornadas anteriores de Segunda.
Ya de entrada, la baja por sanción de Adrià Pedrosa –quien en el partido anterior, frente al Sporting en El Molinón, había visto su quinta amarilla en una inocente acción en que molestó al portero Diego Mariño– propició el retorno al césped de Dídac Vilà, nueve jornadas y tres meses después, para ocupar el carril izquierdo. Algo todavía más retorcido ocurrió en la diestra, con Miguelón Llambrich lesionado de gravedad desde la visita al Mallorca y con Óscar Gil, su sustituto, con molestias que le habían impedido entrenarse toda la semana. Fue Lluís López, quien de hecho ya lo había relevado en los minutos finales de Gijón por idéntico motivo, quien asumió su puesto en la alineación.
Y si Lluís estuvo más que correcto pese a tratarse de un central puro, ya que incluso inició con un pase interior la jugada del 1-0, en la otra banda Dídac marcó el signo del encuentro, con una durísima entrada sobre el tobillo de Juanjo Nieto que primero fue amarilla pero, tras mandar revisarla el VAR, se convirtió en una roja directa.
Ahí prosiguió, porque no quedaba más remedio, el baile de laterales, ya que con diez tuvo que ser Leandro Cabrera quien cayera a la banda zurda para no dejar coja a la zaga. Afortunadamente, el uruguayo sí se había desempeñado en dicha demarcación durante buena parte de su etapa en el Zaragoza y en un tramo de su periplo en el Getafe.
Quedaba aún la traca final, que propició Vicente Moreno para buscar a la desesperada el gol de la victoria, cuando en el minuto 82 retiró a Lluís López para dar entrada a Nico Melamed. En ese tramo final del partido ante el Oviedo, fue todo un (segunda) punta como Javi Puado quien se ocupó del lateral diestro como un zaguero más.
Y en el banquillo todavía quedaba un lateral puro, el canterano Omar El Hilali, que cumplía su segunda convocatoria en LaLiga Smartbank –la primera había sido en el Espanyol-Girona–, a su regreso de la Copa de África Sub-20, pero que aún no ha debutado. Si persisten las molestias de Óscar Gil, muy probablemente sea la próxima cara nueva en unas bandas que hasta ahora se habían repartido entre cuatro inquilinos: los 17 partidos de Miguelón en la diestra por los diez de Gil, y los 20 de Pedrosa en la izquierda por los ocho de Dídac.