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TENERIFE

Una visita que todavía estremece

A la última vez que el Alcorcón jugó en el Heliodoro, en diciembre de 2019, se la recuerda por la grave lesión de Borja Lasso quien aún sigue lesionado.

Una visita que todavía estremece

La última visita del Alcorcón al Heliodoro no es recordada por un golazo, por el buen nivel de juego mostrado o por un polémico penalti. Desgraciadamente viene a la mente de todos los aficionados del Tenerife una terrible entrada a Borja Lasso que todavía le tiene lesionado.

Dicho partido se jugó el 14 de diciembre de 2019. El 0-0 final pasó a un segundo plano porque a poco de empezar el encuentro Serhiy Myakushko le hizo una durísima falta a Lasso. Increíblemente, el colegiado Gorostegui Fernández (curiosamente el mismo que pita este domingo), solo le enseñó amarilla al ucraniano, mientras que el andaluz debió pedir el cambio a los siete minutos porque no podía ni pisar. Nadie, ni el propio futbolista, imaginaban todo el calvario que vendría después.

El parte médico le diagnosticó una fractura distal del peroné izquierdo que tuvo que pasar por el quirófano en dos ocasiones por diferentes complicaciones. Desde entonces, Lasso no ha vuelto a jugar y hasta pensó en dejar el fútbol de manera anticipada al no ver mejoría. Gracias a su tenacidad, afronta la recta final de su recuperación.

Afortunadamente, las anteriores visitas del Alcorcón al estadio no fueron tan dramáticas. En total, han sido ocho duelos jugados en el Rodríguez López con un balance de cuatro triunfos blanquiazules, dos empates y otras dos victorias madrileñas, la última de ellas en enero de 2016 por 1-2 merced a los aciertos de Fausto y David Rodríguez.

La más reciente alegría tinerfeña se dio el 27 de octubre de 2018 gracias a un ajustado y casi heroico 3-2: Malbasic, Luis Milla y José Naranjo convirtieron para los por entonces pupilos de José Luis Oltra quienes a los cuatro minutos ya perdían 0-2 por los goles de Shangalli (a los 15 segundos) y Juan Muñoz.

Hay otros dos resultados que merece la pena resaltar. Uno de ellos es el 0-4 que endosó el equipo de Miguel Álvarez en 2014 el día del estreno de Nano en el Tenerife y el otro es un 4-0 en septiembre de 2017.