"Me dijo que tiraría a mi mujer al canal y mataría a mis hijos"

Las redes sociales tienen una parte positiva, la posibilidad de estar hiperconectados y conocer la forma de pensar de muchos de nuestros ídolos. Sin embargo, hay una vertiente oscura que las convierte en un peligro equiparable a cualquier arma blanca. El anonimato da poder a quienes pretender herir sin mostrar el rostro y Paul Merson, exinternacional con Inglaterra (jugó la Eurocopa del 92 y el Mundial del 98) y leyenda del Arsenal de los años 90, puede dar buena cuenta de la peor cara de la red.

Merson (52 años), ahora habitual analista televisivo, ha relatado en el 'Daily Star' la angustia sufrida hace seis meses cuando, a través de Instagram, recibió unas amenazas tan terribles que le hicieron replantearse si merecía la pena seguir exponiéndose públicamente en las redes sociales, puesto que los mensajes recibidos no solo apuntaban hacia su persona, si no, que iban dirigidos a su mujer y sus hijos.

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"Tuve una amenaza atroz hace un tiempo por decir que el Manchester United no ganaría la liga con Anthony Martial como delantero centro. Alguien me dijo que tiraría a mi mujer al canal y mataría a mis hijos. Se lo conté a mi mujer y ambos nos sentamos y dijimos: '¡WoW!'", explicaba el excentrocampista. Sin embargo, lo que más lamenta el también exjugador del Aston Villa es no haber denunciado el caso a la policía.

"Cuando me llaman 'drogata'... Es duro"

"Mi agente me preguntó si quería ir a la policía, pero le dije: 'No, este chico claramente no está bien. Es mi culpa por haberlo leído. Ahora miro atrás y lamento no haberlo denunciado a la policía. Simplemente para enseñarle una lección, ¿sabes? Otro que se escapó impune", continúa. Para confirmar al momento aquello que avanzábamos anteriormente: "Le dije a alguien al día siguiente que me iba de las redes sociales".

Su caso es especialmente complicado, puesto que Merson ha hablado abiertamente de sus problemas con el alcohol, el juego y la cocaína en el pasado, convirtiéndolo, de esta forma, en objetivo habitual de la ira de internet: "A veces me afecta. En días en los que no estoy fuerte y la gente me llama 'drogata' o cosas peores... Es duro. No necesitas ese tipo de cosas en tu vida".

"Bebía 35 pintas a la semana"

En su día llegó a reconocer que "bebía al menos 35 pintas de cerveza a la semana y jugaba mucho". Pero afirmó que todo aquello formaba parte del pasado: "Ahora estoy sobrio y no apuesto. Tan pronto como afronté el problema con la bebida, dejé de jugar. Me he dado cuenta de que pierdo todo el poder cuando bebo. Soy un alcoholico", afirmó. Ahora, recuperado, ha tenido que afrontar otro tipo de problema, uno que cada día es más habitual y contra el que es complicado combatir, las redes sociales.