Pjanic está sentenciado
Aunque Koeman intentó suavizar su decisión al descanso en la rueda de prensa, la falta de intensidad y ritmo de juego del bosnio le desespera. Perdió siete balones.
Decididamente, Miralem Pjanic ha agotado la paciencia de Koeman. El holandés no le perdonó ayer los siete balones perdidos en la primera parte. El bosnio recuperó ocho, pero su falta de intensidad y de "ritmo de juego" sacó de quicio al técnico, que lo dejó en el vestuario al descanso y sacó a Dembélé. Los números de Pjanic expresan bien la desconfianza de Koeman desde principio de temporada. No llega a los 600 minutos en LaLiga y sólo ha jugado un partido completo. La primera idea de Koeman cuando aterizó en Can Barça era jugar con un 4-2-3-1 en el que Pjanic debía tener un rol principal. Pero resultó palpable desde el inicio que había algo en el futbolista bosnio que no convencía a Koeman.
Pjanic llegó al Barça después de un acuerdo con la Juventus para intercambiarlo por Arthur. Su discurso en la presentación convenció y llenó de expectativas el entorno en Can Barça. Pero Pjanic, que aún no ha cumplido 31 años, no está cumpliendo las expectativas. Dice no entender por qué juega tan poco, pero el tiempo le está quitando la razón.