Aprobados y suspensos del Sevilla: Lo que se le pide a un equipo
El Sevilla se pasea por Pamplona con un Fernando estelar, un Joan Jordán pletórico y un Óliver Torres que agarra por derecho propio la camiseta de titular
Bono: Sólo le exigieron en los balones aéreos y respondió a la perfección, además de desviar eficientemente con su mirada el cabezazo de Oier que se estrelló con el palo al comienzo del partido. Otra portería a cero para su cuenta. Lo que se le pide a un portero ¿no?
Navas: En la primera mitad comenzó a parecerse al Navas anterior a su lesión, pero se fue apagando con el paso del partido. Suma 90 minutos a las piernas para seguir recuperando sensaciones.
Koundé: Ahora parece que si no hace una jugada maradoniana o se incorpora al ataque constantemente, no hace un buen partido. Pero todo lo contrario. Estuvo perfecto en defensa.
Diego Carlos: Desde que superó el coronavirus está muy cerca del nivel colosal que mostró la temporada pasada. No concedió ni media ocasión y marcó el 0-1 con un remate perfecto a balón parado. Lo que se le pide a un central ¿no?
Rakik: Al central desgarbado que se le colocaba en la banda izquierda porque no había otro y que parecía no saber que el balón era redondo lo han cambiado por un tío al que la palabra cumplidor se le empieza a quedar corta. La mejor muestra es que los rivales ya no le dejan que campe a sus anchas confiados en su falta de calidad. Porque es que defiende bien y cada vez ataca mejor.
Fernando: Lo habrán leído aquí docena y media de veces y tiene pinta de que lo volverán a leer, como mínimo, otra docena y media. ¿Cómo demonios estaba desperdiciando su carrera en Turquía mientras la totalidad de equipos de la Liga tiraban el dinero en centrocampistas que a su lado no valen absolutamente nada? Pues no dimite ni un director deportivo, qué barbaridad.
Jordán: Recuperó balones, combinó con criterio siempre, se incorporó al ataque y, encima, asistió en el 0-1 con un córner sacado a la perfección. Lo que se le pide a un centrocampista ¿no?
Óliver: Dinámico y haciendo prácticamente pleno en la toma de buenas decisiones. Lo que se le pide a un organizador ¿no?
Suso: Más apagado que últimamente, pero ejerció de pegamento en ataque. Se fue levemente tocado.
De Jong: Si el Sevilla aún tiene opciones de pasar a los cuartos de la Champions es gracias a él. Si hubo sevillistas que quitaron el partido a la hora del mismo para ver el debate de la isla de las tentaciones con la tranquilidad de que su equipo iba a ganar, también fue gracias a él y a su taconazo. No es lo mismo, pero también vale. Marcó y se partió la cara. Lo que se le pide a un nueve, ¿no?
Munir: Estuvo en todas, le dieron patadas de todos los colores y asistió a De Jong en el 0-2. Lo que se le pide a un segundo punta ¿no?
CAMBIOS
Aleix Vidal: Dio profundidad por su banda.
Rakitic: No terminó de cogerle el aire al partido y salió descolocado.
Papu Gómez: Un zurdazo con muy mala leche.
En Nesyri: Ayudó mucho en los balones aéreos que Osasuna colgó a la desesperada.
Gudelj: Muy poco tiempo.