Villares: “Estoy con ganas de más después del debut”
Diego Villares (Vilalba, 1996) pasó en tres días del filial a tener ficha con el Deportivo y debutar. Llega decidido a no “cortarse. Es lo que me ha traído hasta aquí”.
¿Cómo va la semana después de tantos cambios en el club?
Todo eso es una cuestión de club que a los jugadores no nos tiene que influir en nada. Nosotros tenemos que seguir trabajando y sacar estos partidos que nos quedan empezando por el de este domingo.
Usted lleva varios años en el club. ¿Cómo percibía desde el filial esa constante tensión con cambios de entrenadores, presidentes y descensos?
Como jugador intentas abstraerte lo máximo posible de todo ese ruido, de esa presión. Intentas olvidarte de los despachos, pero algo te llega, claro. Se nota que el club no está en el mejor momento.
¿Y cómo está usted tras debutar con el Depor?
No fue el debut soñado por el resultado, por la derrota. Pero estoy muy ilusionado de poder ayudar al equipo. Estoy con ganas de más después del debut.
El paso siguiente, ¿la titularidad?
No sé si será la titularidad, lo que tengo ganas es de seguir sumando minutos y aportar cosas como ante el Coruxo. Sobre todo, que mi ayuda sirva para lograr la victoria.
¿Cuánta pena le va a dar debutar en Riazor y tener que hacerlo con la grada vacía?
Es un poco triste, sí. Nunca he jugado en un estadio así como Riazor. Lo hice el año pasado con el Fabril, pero es otra cosa. Me daba pena verlo así por la tele, pero como otros estadios. Las circunstancias son las que son, pero queda ese punto de tristeza.
Ahora estará contento de haberse quedado este verano en el Fabril…
En verano no sabía si iba a renovar o no, pero al final se dio. Ya estaba contento en el Fabril, esto es un sueño.
¿Esperaba subir del filial al primer equipo?
No, la verdad es que no lo esperaba. Ya no soy sub-23 y entonces si subía ya no podía bajar al filial. Me cogió por sorpresa y estoy muy ilusionado.
Renovó hasta 2022, ¿no?
Sí. Mi contrato acababa en 2021, pero al subir al primer equipo lo hemos ampliado otra temporada más.
¿Mucho cambio pasar de un día para otro del vestuario del Fabril al del Deportivo?
Sí que es un vestuario distinto. Es gente algo mayor, más experimentada y de mucho fútbol. Es gente que ha vivido mucho a los que veo con ganas de dar un arreón final y ganar los partidos que quedan.
¿Qué es lo que le ha costado más con el primer equipo?
La integración fue muy fácil, todo el mundo se portó muy bien conmigo. Hay jugadores que ya conocía del Fabril. Lo que más me costó al principio fueron los entrenamientos porque venía de una cuarentena con el Fabril por un positivo. Me costó un poquito, pero ya estoy alcanzando mi nivel físico óptimo.
¿Qué les está pidiendo ahora el míster?
Que hay que ir a muerte hasta el final. Que nadie se baje del barco porque vamos a pelear por todo hasta el último minuto.
¿Dónde cree que está el principal bloqueo que tiene el equipo?
Creo que llevar tanto tiempo sin meter un gol bloquea al equipo. Lo necesitamos para quitarnos la presión, necesitamos quitarnos esa losa. Si llega, estoy seguro que vendrán muchos más. Estamos generando ocasiones y seguro que van a llegar y nos van a servir para ganar.
Tienen que llegar rápido, porque el equipo mira ahora más hacia abajo que hacia arriba.
Sí, estamos ahí en la mitad y no nos podemos confiarnos nada. Nuestro objetivo es ganar y subir lo máximo posible.
Hasta ahora la presión, el famoso peso de la camiseta, era por ganarlo todo. Ahora ya lo es por la amenaza de un descenso…
Eres el Deportivo y siempre tienes la obligación de ganar, de estar arriba… A principio de temporada se podía pensar que con el escudo se iba a ganar, pero yo sabía que la Segunda B es muy complicada.
¿Qué se juega el Deportivo con el Guijuelo?
Es un partido muy importante. Y cuando pase, ya miraremos a lo que nos queda. Es una victoria muy importante para afrontar lo que queda de temporada con ilusión y ganas.
¿Qué le diría a un aficionado para que recupere un poco de optimismo?
Que a la gente no le quepa duda que el equipo está más unido que nunca y convencido de pelear hasta el final para lograr el objetivo.
¿Cómo resumiría su carrera hasta llegar al Depor?
Soy un chico de pueblo de Vilalba. Desde alevín con diez años jugué allí hasta que en juveniles, con Óscar Gil Sanz, me llegó la oportunidad con el primer equipo. Logré hacerme un hueco y a partir de ahí estuve dos años hasta que llegué al Fabril.
El otro día se definía con un ‘8’…
En el Villalbés jugaba en una posición más adelantada partiendo de la banda izquierda. Con Valeón jugué varios partidos de ‘6’, pero al final acabé con otro mediocentro y actuando más adelantado. Creo que es mi posición ideal, con alguien por detrás.
¿Y coincide De la Barrera con usted?
Me ve en esa zona, de ‘8’ o de ‘10’, como se le quiera llamar. Rubén me ha dicho que sea el mismo futbolista que en el Fabril, que no me corte para nada. Que siga haciendo lo que estaba haciendo, que es lo que me ha llevado hasta aquí.
Acabemos en positivo. ¿Ha pensado ya cómo celebraría su primer gol?
La verdad es que nunca he tenido ninguna celebración especial. Además, tampoco soy un jugador muy goleador, aunque me gustaría. Si hubiese gente en la grada se lo dedicaría a mi familia, pero no puede ser. Si llega lo celebraré normal junto a mis compañeros.