El Mirandés firma el tercer triunfo consecutivo en Castalia

El Mirandés se llevó los tres puntos de Castalia y firma su tercerca victoria consecutiva, que les proyecta a los puestos altos de la tabla. El Castellón, que mejoró con la entrada de Yann Bodiger, sufrió el gol de Iván Martín cuando mejor estaba. Sin embargo, los de José Alberto dominaron la totalidad del encuentro y acabaron más cerca de la sentencia que los albinegros de la reacción.

El Castellón de Juan Carlos Garrido no engaña: ha transformado un equipo basado en la posesión en un conjunto que disfruta del balón directo. Cualquier acción es una buena excusa para colgar un balón al área, desde cualquier sector del campo, ya sea a durante el juego, desde un saque de banda o una falta lateral, con Marc Mateu, máximo asistente de la categoría, como principal protagonista.

Sin embargo, el Mirandés mandaba desde la posesión. Cristo, cómo no, tuvo la primera del encuentro tras un gran envío de Pablo Martínez, pero su disparo de zurdas no inquitó lo más mínimo a Álvaro Campos. El delantero tinerfeño suma tres goles en otros tantos partidos. Una garantía.

Pero la más clara cayó del lado de los albinegros. Cubillas cazó un pase paralelo en defensa que el delantero castellonense no supo aprovechar tras una gran intervención de Berrocal. Minutos más tarde, el VAR revisó un posible penalti sobre Iago Indias tras un envío directo de Mateu desde el saque de banda. Los de Garrido, sin balón, comenzaban a asomar la cabeza.

Los de José Alberto, mientras, no se inquitaban con las puntuales llegadas rivales y mantenían el plan de juego. Desde la posesión, con Iván Martín y Djouahra agitando desde las bandas, Cristo y Martínez encontraban espacios por dentro para hacer daño. Indetectable el centrocampista cedido por el Levante, el mejor de los primeros minutos.

Garrido se olió la tostada y, tras el paso por vestuarios, dio entrada al nuevo fichaje, Yann Bodiger, para sumar elementos al centro del campo y asfixiar el juego rival. De esta manera, Rubén Díez pasó a banda derecha, con el centrocampista fracés sumándose a la línea de medios.

Lo cierto es que el cambio dio sus frutos y el Castellón se mostró como un equipo más sólido, ahogando la salida desde atrás del rival con mayor intensidad. Aunque cuando el Mirandés arrancaba con espacios siempre daba sensación de peligro. También Marc Mateu, un jugador que está en un estado de forma de una categoría superior. No lo vio así Garrido, que lo retiró del campo dando entrada a César Díaz junto a Señé, por Carles Salvador.

Sin Mateu, Víctor García se puso el mono de asistente y su envío casi la pone dentro Cubillas, al que sólo le faltó ajustar su remate. A los pocos segundos, César Díaz trató de sorprender con una vaselina tras un pase magistral de Rubén Díez con el exterior. Los locales desactivaron el centro del campo del Mirandés y comenzaron a jugar.

Cuando mejor estaban los locales, Iván Martín sorprendió a todos. Arrancó en medio de un mar de piernas albinegras y su disparo se envenenó tras impactar en Javi Moyano para sorprender a Campos. En un abrir y cerrar de ojos, el Mirandés convertía las sensaciones y ventaja, cuando los castellonenses comenzaban a despertar. Gol en un momento clave. Jirka, nada más entrar, en la primera que tuvo, casi firma la sentencia. Cristo, por su parte, perdió la partida con Delgado en un mano a mano con Campos. El Mirandés acabó más cerca de la machada, que el Castellón de la reacción.