Increíble: la Atalanta desperdicia un 3-0 ante el Torino
El Torino igualó un partido que tras apenas 20 minutos parecía perdido debido a un gran arranque del rival del Madrid en la Champions. Gasperini, enfurecido, solo se llevó un punto.
La Atalanta desperdició increíblemente un 3-0 ante el Torino, llevándose solo un punto tras un partido que resumió perfectamente todas sus virtudes y sus defectos. Cuando van a toda pastilla, por ejemplo, los de Bérgamo son imparables. Lo volvieron a demostrar hoy entre el 15' y el 21', marcando hasta tres goles. El primero fue de Ilicic, que recibió un pase largo de De Roon y ganó con algo de suerte el mano a mano con Sirigu. Gosens realizó el 2-0 con un potente remate casi sin ángulo, recibiendo un centro raso de Muriel, mientras que el colombiano fue el autor del 3-0, con una vaselina después de un rechace del meta rival.
Quedaban más de 70 minutos de juego, pero la Atalanta pensó que los deberes estaban hechos, en la semifinal de Copa del miércoles ante el Nápoles (necesitará ganar) y, quizás, en el 0-7 que le endosaron hace un año a los granata. Su intensidad, entonces, bajó, y ahí es cuando aparecen los problemas de los nerazzurri. El conjunto de Nicola renació después de un bonito gesto de Belotti, que le hizo cancelar una amonestación a Romero reconociendo que se había caído sin que el defensa le tocara.
No sabemos si fue cuestión de karma, pero después de eso, llegaron dos goles para los visitantes. El primero fue del mismo ‘Gallo’, que forzó un penalti por una falta de Palomino y lo falló, pero tras la parada de Gollini recortó distancias con una volea. A instantes del descanso, además, un arreón de los turineses valió el 3-2, realizado por Bremer después de un remate al larguero del recién fichado Mandragora.
La Dea no supo reanudar su juego y el enfrentamiento, en la segunda mitad, fue muy igualado. Ambos contrincantes remataron a la madera (con disparos de Singo y Miranchuk), aunque con el paso de los minutos el Toro acabó siendo mejor y empató merecidamente. El tanto del 3-3 lo realizó Federico Bonazzoli con un gran testarazo en una falta lanzada por Verdi, y el equipo de Nicola hasta buscó completar la remontada en los últimos minutos. El último intento, de hecho, fue del mismo Verdi, con un remate desde lejos que bloqueó Gollini. Gasperini ayer afirmó que la prioridad del equipo era la semifinal de vuelta con el Nápoles. Sus jugadores, desaparecidos tras 20 minutos, al parecer le hicieron caso.