Dimata: 14 horas de coche para una larga carrera en España
Así fue la aventura del fichaje del Espanyol, que eligió “el mejor proyecto deportivo” y que “viene para quedarse” tras superar la revisión “con los mejores especialistas”.
Ingresaba en el césped del Lotto Park en el minuto 85 ante el Gent, consciente de que –si todo iba bien– serían sus últimas carreras con el Anderlecht. Era el pasado domingo, y tras su paso por la ducha, sobre las diez de la noche a Landry Nany Dimata le esperaban un coche, con chófer contratado para la ocasión y su representante, José Rodríguez, de la agencia Promoesport Bélgica, que posee sus derechos. Pero, sobre todo, le aguardaba –previa obtención del permiso laboral para moverse con garantías en plena pandemia– un largo viaje por carretera desde Bruselas hacia Barcelona.
Fueron 14 las horas de recorrido las que trazaron sin parar, con lluvia, viento, temperaturas bajo cero –con razón en su presentación destacó el clima de la Ciudad Condal– y de noche, para llegar a punto a la revisión médica que el lunes tenía programada. Ninguna combinación aérea les garantizaba tanta puntualidad. Y no podía el delantero fallar a la cita con su destino.
Tras una larga lesión de rodilla, que lo tuvo apartado de los terrenos de juego durante 18 meses hasta el pasado verano, quería el Espanyol asegurarse de que su rodilla estaba en perfecto estado de revista. Todo o nada. Le chequearon la articulación “algunos de los mejores especialistas del mundo”, en palabras de su agente a AS. Y, a diferencia de lo ocurrido meses antes con el Dijon, pasó la prueba.
"El Espanyol es el mejor lugar para crecer y consolidarse, un club histórico que pronto volverá a Primera"
También superó otro test, el de un Anderlecht que había opuesto resistencia a su salida. Menos duro fue para Dimata elegir la del Espanyol entre otras ofertas que reunía, de Italia, Francia, Turquía, Grecia y de la propia Jupiler Pro League belga. “Aunque llevamos poco tiempo con él, sabíamos que su sueño era jugar en España”, expone Rodríguez, “y hemos elegido el mejor proyecto deportivo. No se trata de vivir unos meses en Barcelona y marcharse –aunque llega cedido con opción de compra–, sino de venir para quedarse. Nany quiere hacer carrera en España a largo plazo, y el Espanyol es el mejor lugar para crecer y consolidarse, un club histórico que pronto volverá a Primera”, sostiene.
Con el francés como lengua nativa, empezará de inmediato a aprender castellano el fichaje de invierno del Espanyol, que por ahora se comunicará con el cuerpo técnico de Vicente Moreno y con sus compañeros de plantilla en inglés, que ya practicó en su época de la Bundesliga con el Wolfsburgo. Lo hará a partir de este jueves, en su primer entrenamiento grupal una vez haya superado el test PCR al que se sometía este miércoles por la mañana.
¿Y jugar? ¿Podrá hacerlo de inmediato? El propio Dimata aseguró en el transcurso de su presentación que la grave lesión de rodilla “ya está olvidada”, pero lo cierto es que venía sumando participaciones a cuentagotas con el Anderlecht. “Si no participaba más, no era por ninguna dolencia, sino por el criterio de su entrenador –el exfutbolista del Manchester City Vincent Kompany–, que prefiere a otro delantero”, es decir, a Lukas Nmecha, cedido precisamente por el City y que lleva 12 goles esta temporada.
“Está perfectamente y sus ganas son tremendas”, afirma su representante. El Anxo Carro puede representar su primera oportunidad. Con temperaturas, el lunes por la noche en Lugo, similares a las de Bélgica. Pero esta vez sin viaje por carretera.