En el Anxo Carro se volvió a repetir una situación que tiene a mal traer al Tenerife. Cada vez que se pone por debajo en el marcador, es incapaz de dar vuelta la historia. Es que lo blanquiazules no consiguen remontar desde el 4 de julio del año pasado cuando el Almería se adelantó a poco de empezar el encuentro, pero Luis Milla primero y Álex Bermejo después le dieron la victoria a los de Rubén Baraja (1-2).

Tenerife

• España

• Noticias
• Estadísticas

A partir de entonces, hasta en 16 ocasiones los tinerfeños empezaron perdiendo su partido y lo máximo que consiguieron fue rascar un empate (ante el Gijón o Fuenlabrada, por ejemplo). Todo lo demás, acabó en decepción, como sucedió en Lugo este sábado.

Los de Ramis llegaban en racha a tierras gallegas y a una ciudad que se le daba históricamente bien, pero tropezaron dejando malas sensaciones. A pesar de intentarlo aunque sin demasiada claridad, no consiguieron enderezar el rumbo que se les torció muy pronto y se vuelven a acercar a la zona de descenso.

“Teníamos las ideas muy claras de lo que necesitábamos, pero hemos cometido muchas imprecisiones. Los laterales han sido poco protagonistas y en defensa no hemos estado sólidos ni solidarios. Al final, todo pesa”, explicó visiblemente molesto el técnico tras el 2-0.

Lo curioso es que esta temporada, todas las victorias del Tenerife se saldaron con la portería a cero. En ninguno de sus siete triunfos ligueros ni en los dos por la Copa del Rey, ni Ortolá ni Dani Hernández tuvieron que ir a buscar el balón en su meta. Sin embargo, cada vez que se encaja, los tres puntos le son esquivos. Lo de Lugo lo confirmó.