Sergio Ramos está en riesgo
En la recta final de su contrato y sin renovar, una lesión pondría en peligro el último gran contrato de su carrera, como sucedió a Valdés.
Como cualquier jugador que apura su contrato hasta el último momento sin haber renovado, Sergio Ramos está en riesgo. El jugador y su entorno son muy conscientes de ello. Cualquier acción de mala fortuna, una inoportuna lesión de larga duración, puede dar al traste con la posibilidad de firmar un último gran contrato, ya sea en el Real Madrid o en otro equipo. Hay mucho dinero en juego, 24 millones brutos por ejercicio, que es lo que cobra el defensa. Con todo, y como demostró en las semifinales de la Supercopa ante el Athletic, a Ramos le puede el pundonor. Esa final la jugó con molestias en la rodilla. Pero es lógico pensar que en lo que queda por delante el jugador tenga que tomar decisiones importantes para no poner en riesgo su salud. De todos es conocido que son muchas las veces en su trayectoria que ha jugado estando lesionado por ayudar al equipo…
El último precedente de percance, y muy cercano para él porque eran compañeros de la Selección que más ha ganado en la historia de nuestro país, fue el de Víctor Valdés. La mala fortuna se cebó con el entonces guardameta del Barcelona, que estaba en su último año de contrato sin haber renovado porque ya había tomado la decisión de irse. Fue el 26 de marzo de 2014 frente al Celta. Una rotura en los ligamentos de la rodilla cambió su destino, que apuntaba a ser el Mónaco, entonces de moda en el continente por su fortaleza deportiva. En ese momento, Valdés incluso tenía opciones de ser titular por delante de Casillas en el Mundial de Brasil. Después de la lesión y de una dura recuperación (y perder el último gran contrato de su vida), tocó varios equipos (United, Standard de Lieja, Middlesbrough…) antes de su retirada.
El caso Valdés fue especialmente significativo porque mostró lo cruel que puede llegar a ser el fútbol, que no entiende de aspectos personales. El portero catalán tenía firmado, incluso, un precontrato con la entidad monegasca por cuatro años (podía a partir de 1 de enero porque la FIFA lo permite). Pero después de su lesión el Mónaco no quiso hacerlo efectivo. “Haremos valer lo que está firmado”, señaló entonces, muy enfadado, Gines Carvajal, representante del guardameta.
En el Barcelona hay un caso radicalmente opuesto con otro jugador importante, Piqué. El capitán blaugrana se lesiono poco después de firmar una renovación exprés con Bartomeu. Terminaba contrato en 2022 (cuando tendría 35 años) y firmó por dos más hasta 2024. Una tranquilidad, como es lógico, para un futbolista que, como Ramos, tanto ha dado por su club. No estaba Piqué en su último año de contrato en el momento de la lesión, pero la rodilla le mantendrá varios meses apartado de los terrenos de juego. Si eso llega a suceder en los últimos meses de contrato… el problema es serio.
La fortaleza física de Ramos y su gusto por cultivar el cuerpo han alejado a capitán del Madrid de tener grandes lesiones a lo largo de extensa carrera, que comenzó en el Sevilla en 2003. Ya ha llovido… Ramos es un ejemplo, campaña a campaña ha venido jugando una media que roza los 50 partidos (sin contar los disputados con la Selección). Sólo en la 2015-16 se quedó en 33, y fue por una lesión en el hombro de la que sufrió una recaída. Esta temporada es el octavo jugador de campo del Madrid en minutos (tiene por delante a Varane, Benzema, Mendy, Kroos, Casemiro, Modric y Lucas Vázquez). El tiempo dirá diciendo de qué manera afecta al capitán estar sin contrato a partir de junio de este año.