El Nîmes asalta Marsella
Los de Arpinon, penúltimos en la tabla, hurgaron todavía más en la yaga de un Olympique de Marsella que se aleja definitivamente del liderato de la Ligue 1.
El Nîmes Olympique, penúltimo clasificado de la Ligue 1, dio una de las sorpresas de la jornada y venció por 1-2 en su visita al estadio del Olympique de Marsella. El conjunto marsellés, que tenía opciones de pelear por la Ligue 1, sucumbió en un partido muy flojo en líneas generales que volvieron a evidenciar los problemas que tiene el equipo cuando enfrenta a rivales que le repliegan.
La principal novedad en el once de Villas-Boas fue el debut de Pol Lirola como titular en el lateral derecho. El ex de la Fiorentina había tenido buenos minutos contra el PSG en la final de la Supercopa y el portugués decidió darle la titularidad. Benedetto volvía a ser la referencia en ataque y Payet y Thauvin ocuparon los carriles.
La primera mitad sirvió para evidenciar que el OM necesita un 9 cuanto antes. Benedetto no es mal delantero, pero su falta de gol está siendo un condicionante para que su equipo tenga opciones de pelear por la Ligue 1. De hecho, el club phocéen acumuló 135 minutos sin marcarle gol a Dijon y Nîmes, dos de los peores equipos del campeonato y cuyas estructuras defensivas son muy vulnerables.
A pesar del 0-0 al descanso, el Marsella se pudo ir al descanso con ventaja en el marcador. Sanson y Payet tuvieron dos oportunidades claras de gol en el tramo inicial del encuentro, pero un soberbio Reynet las repelió. Minutos después, Benedetto forzó un penalti por mano de Alakouch que acabaría fallando Thauvin de forma incomprensible. El delantero argentino falló una ocasión flagrante antes del descanso, pero Reynet volvió a aparecer de forma impresionante. A pesar de su floja primera mitad, el Nîmes pudo adelantarse en el marcador, pero Pelé, titular hoy por la lesión de Mandanda, realizó la parada de la noche un testarazo de Koné en el punto de penalti.
Lo de Koné en la última jugada de la primera parte fue un presagio de lo que estaba por llegar en la segunda. El Nîmes salió muy atrevido del túnel de vestuarios y encontró su premio por partida doble de forma sorprendente. Primero, a través de Eliasson, que remató sin querer un centro de Alakouch en el área y su disparo con la rodilla acabó en la red. Y, segundo, a través de un Ferhat que se mostró como una pesadilla durante los 90’ para el Marsella y fabricó el segundo gol de los cocodrilos, también materializado por Eliasson. El Marsella entró en un bucle de desesperación del que no pudo salir a pesar del gol de Benedetto en el tramo final (tras un error del también ex de Boca Andrés Cubas, que hizo un partidazo salvo esa concesión) que le aleja casi definitivamente de luchar por la Ligue 1.