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SUPERCOPA ESPAÑA

¿Qué fue de Santi Aragón? El madridista que metió uno de los mejores goles de los Clásicos

La Supercopa de España de la temporada 90/91 pasó a la historia por este golazo tremendo del jugador nacido en Zaragoza.

¿Qué fue de Santi Aragón? El madridista que metió uno de los mejores goles de los Clásicos

“El Madrid me formó como jugador y como persona, y al final desarrollé mi carrera en otro equipo, como muchos otros jugadores”. Santiago Aragón (Málaga, 03/04/1968) fue un talentoso mediocentro que disfrutó de sus mejores momentos como futbolista con la camiseta del Real Zaragoza. Durante su carrera marcó goles importantes y también muy bonitos, pero, sin duda, el más recordado es el que hizo a Zubizarreta, desde más de 40 metros de distancia, durante el partido de vuelta de la Supercopa de España de 1990 entre Real Madrid y el Barcelona.

Santi había regresado aquel año al club blanco después de salir cedido al Espanyol y al Logroñés en las dos campañas anteriores. Formado en la cantera madridista, la entidad de Chamartín lo repescó tras su progresión en el conjunto riojano, con el que jugó 23 partidos y anotó tres goles.

Así, el 12 de diciembre de 1990, tuvo la oportunidad de estar sobre el terreno de juego para dejar grabado en la retina de la afición blanca, la azulgrana y la de prácticamente todos los equipos de España un auténtico golazo. En el minuto 70, tras salvar la zancadilla de un rival en el círculo central, Santi Aragón levantó la cabeza y batió a Zubizarreta con un disparo que entró en la historia del fútbol español.

Le costó encontrar la estabilidad en el Real Madrid

Santi Aragón empezó a jugar al fútbol, como cualquier niño o niña, en el patio del colegio. En su caso, en el de los Hermanos Maristas de Málaga. Después, llegó su primer equipo federado, el Puerto Malagueño Atlético Guimbarda. Ya en plena adolescencia, con 15 o 16 años, según cuenta el propio exfutbolista, su padre, técnico del Málaga, recibió una carta del Real Madrid solicitando unas pruebas para tres futbolistas. Uno de ellos era Santi. Así, en 1984, él y sus compañeros Alberto y Pariente se fueron una semana a Madrid. En la capital, observando, estaban Molowni, Del Bosque, Toni Grande... Les gustó y se quedó.

Dos años después, con 18, dio el salto al Castilla, que estaba en Segunda, para debutar una temporada después, el 16 de abril de 1988, con el primer equipo blanco ante el Celta. Todo parecía ir rodado para un centrocampista talentoso y con un gran disparo a media y larga distancia, pero quedarse con ‘los mayores’ siempre es difícil. Y más en un club grande.

Así que a Santi le tocó salir de la casa blanca para encontrar su sitio. El medio malagueño jugó ocho partidos en el Espanyol en la temporada 1988-89 y un total de 23, anotando tres goles, en el CD Logroñés, en la 1989-90. Gracias a su buen año pudo regresar al Real Madrid, pero ni siquiera su golazo en la Supercopa le sirvió para ganarse el puesto en un equipo que vivió momentos complicados. “Pasé por cesiones en el Espanyol, en el Logroñés y en el Valladolid. En esos años hubo muchos cambios de entrenadores en el Madrid, las cosas no eran fáciles”, contaba hace años en una entrevista en El Periódico de Aragón.

Así, tras su última ida y venida desde Valladolid, Aragón llegó al Real Zaragoza, club en el que se sintió bien desde el principio. Al desembarcar, todavía no sabía que sería el equipo de su vida: “A partir del tercer año me di cuenta de que Zaragoza podía ser mi sitio definitivo”.

Zaragoza, lugar para triunfar 

En la temporada 1992-93 el Real Madrid cedió a Aragón al Zaragoza con opción de compra. El centrocampista malagueño participó en diez partidos y metió dos goles. El primero, el día de su debut, fue ante el Tenerife en una maravillosa jugada que finalizó con una bonita vaselina. Víctor Fernández, en el banquillo blanquillo, confiaba en él, así que el conjunto aragonés adquirió sus derechos de forma definitiva para la temporada siguiente, la de su consagración.

“Quitando el Barça y el Madrid éramos el equipo que estaba un escalón por debajo. Muchos partidos les jugábamos de tú a tú, y ganamos muchos de esos enfrentamientos”, explicaba el exfutbolista andaluz en El XI Ideal. Y es que el Zaragoza esos años era mucho Zaragoza: Solana, Cáceres, Poyet, Nayim, Esnáider, Pardeza y hasta un tal Cafú vistió la camiseta blanquilla en la 1994-95.

Ese equipo hizo historia: la Copa del Rey de 1994, la Recopa de Europa ganada al Arsenal en una final épica en 1995, el gol de Aragón en Stamford Bridge... Hasta el propio Aragón volvió a ganar el titulo copero con el conjunto blanquillo en el 2001.Por el contrario, la temporada siguiente, 2001-02, le tocó saborear el lado más amargo del fútbol: un descenso.

El Zaragoza volvió a Primera en la temporada siguiente y Santi Aragón se retiró un 27 de junio de 2003, después diez años jugando de blanquillo.

Entrenador y ojeador de jóvenes futbolistas 

Apenas un año después de colgar las botas, el malagueño ya estaba ejerciendo de entrenador del Infantil de segundo año del Real Zaragoza. Después pasaría por el Cadete, trabajaría de responsable de actividades deportivas del club aragonés y sería segundo entrenador del primer equipo como ayudante de Ander Garitano en 2008. Ahora, según contó el propio excentrocampista en El XI Ideal, Aragón ha vuelto a sus orígenes, el Real Madrid, y forma parte del Departamento de Captación de jugadores para la cantera del Real Madrid.