Asensio, ilusión renovada
El balear se encuentra cada vez mejor y lo demostró ante el Granada. Se ha marchado a las minivacaciones cargado de confianza.
Marco Asensio se ha marchado a estas minivacaciones navideñas con ilusiones renovadas. Su gran partido contra el Granada el pasado miércoles le refuerza una confianza que ha ido a más en el último mes. La salida del balear tras la lesión de Rodrygo mejoró al Madrid y fue decisivo con una gran asistencia a Casemiro en el primer gol, que dio ventaja a los de Zidane hasta que Benzema sentenció en el descuento. Antes había dejado un gran remate con la espuela que se estrelló en el poste.
Estos primeros meses no han sido fáciles para Asensio. Había muchas esperanzas puestas en su rendimiento y después de una lesión tan larga y grave, como es lógico, ha tenido altibajos. Ha combinado grandes actuaciones con partidos discretos, lo que instaló a la opinión pública en una especie de montaña rusa: elogios desmedidos tras los buenos partidos y críticas ácidas tras las actuaciones grises.
El balear, fiel a su estilo, se ha refugiado en los suyos tanto en las buenas como en las malas. Tiene un entorno muy estable y familiar que le permite aislarse del ruido de fuera, para bien y para mal. Sabe que regresar a su mejor nivel es un camino largo y que todavía le faltan varios pasos para la meta, aunque cada vez la ve más cerca.
En las seis victorias consecutivas del Madrid no ha sido titular, aunque es el único jugador al que Zidane ha sacado desde el banquillo en todos los encuentros. El entrenador francés tiene confianza plena en él y por eso quiere dosificarle para que recupere su nivel con calma. Ahora, con la baja de Rodrygo, su rol en el equipo será aún más importante. Ha pasado momentos complicados en lo que va de temporada, pero ahora afronta el final y principio de año con la confianza cargada.