NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

LOGROÑÉS-ESPANYOL

Espanyol, un homenaje al rematador

RdT y Puado rinden tributo al delantero clásico en Las Gaunas, en 50 minutos en los que el Espanyol resolvió el encuentro gracias a su efectividad.

Javi Puado.
Denis Doyle

Homenaje. No podía haber mejor estadio que Las Gaunas, que siempre desprende aroma de otra época, para homenajear a los nueves clásicos, aquellos delanteros a los que solo se les pedía marcar goles, en un fútbol de antaño propicio para los especialistas. Porque eso fueron RdT y Puado, dos arietes que convirtieron cada balón que les llegó en una obra de arte, dos fogonazos de una gran belleza estética, acciones técnicas que deciden partidos.

Pistoleros. Aquellos delanteros eran hombres solitarios, que debían buscarse las habichuelas como un autónomo. Los había pillos, rápidos o corpulentos, pero todos ellos tenían en común su capacidad para armar la pierna con facilidad, como un pistolero. Y así fue De Tomás en la primera mitad. Antes de su excelso gol de falta (¡qué difícil es hallar precisión en un golpe de empeine!), el madrileño anotó un soberbio remate a la red aunque estaba en fuera de juego, así como intentó otros dos lanzamientos siempre con intención, sin importarle si le caía a la derecha o la izquierda. Su cuerpo coordina los movimientos siempre apuntando hacia la portería, como si fuera un jugador de PlayStation.

Cantera siempre. Mención aparte merece Puado, que acumula dos goles en tres jornadas que hacen justicia con sus cualidades. El barcelonés es una bendición para el juego, un delantero moderno, que se adapta a cualquier posición, que entiende los espacios y bien dotado técnicamente, pero necesita ser también un delantero clásico, un asesiono del área. En su golpeo se juntan todas sus virtudes: intuición, conducción y exquistez técnica. Él y Melamed fueron la apuesta en ataque de un Espanyol con siete canteranos. No hay mejor inversión que darle continuidad a los jugadores de la base porque el jugador es mitad talento y mitad confianza.

Para los pesimistas. Con estos goles y el de Darder que culminó una buena presión (hasta seis jugadores del Espanyol llegaron al área del Logroñés), el Espanyol solventó otro partido y suma su cuarta victoria seguida, así, de golpe, después de esas dudas que surgieron en una parte del exigente entorno perico. El Espanyol sigue en ascenso directo y evidencia que no existen dependencias, sino una plantilla en la que cada semana brillan nuevos actores. El domingo ante el Almería existe la oportunidad de cerrar 2020 con 40 puntos o más. Todos lo habrían firmado, sobre todo aquellos pesimistas por devoción. Solo vale subir y el camino es el adecuado.