Conte, situación límite
Al italiano se le acumulan los problemas. A la eliminación de competiciones europeas hay que sumar el enfado de Lautaro por su cambio ante el Shakhtar.
No hubo 'biscotto' entre Real Madrid y Borussia, pero el Inter no supo merendarse al Shakhtar Donetsk. Fin a la aventura europea de un conjunto neroazurro que acaba cuarto de grupo y ni siquiera la Europa League servirá como bálsamo. Antonio Conte, acelerado y contrariado, se defendió de quienes acusaron al equipo de no tener plan B ni garra. "Faltó marcar un gol", reclamó el italiano. Sorprende, por tanto, que retirase del terreno de juego a Lautaro Martínez en el minuto 85, cuando más necesitaba el equipo de su olfato. O, al menos, al argentino le sorprendió.
El de Bahía Blanca abandonó el terreno de juego con muestras patentes de enfado. Si la frustración era consigo mismo o con su entrenador solo lo sabe él, pero hasta ese momento había sido el mejor del encuentro, sin contar la fantástica actuación de Trubin, portero rival. Desde la Gazzetta dello Sport le ponen un 6.5, la nota más alta del Inter junto a Barella, y destacan, además de su partido, el momento de la sustitución: "Salió moviendo la cabeza, quién sabe si esperaba el cambio. El más peligroso, con un larguero al principio del choque y una súperjugada cerca de la conclusión". Conte defendió que el cambio nada tuvo que ver con el rendimiento del jugador, si no con la gasolina del tanque: "Metí a Eriksen cuando vi que Lautaro no aguantaba más". Sea como fuere, a sus 23 años, Lautaro deberá seguir esperando para brillar en la máxima competición continental...
Ahora, sin competición europea a la que asirse, el entrenador italiano se enfrenta a una situación límite, pues si el equipo no convencía en el curso presente, ahora el aumento de las lupas con las que se observarán los partidos de los neroazzurri se verá incrementado. En la Serie A, a pesar de marchar en segunda posición, el intratable Milan de Pioli, Ibra y compañía cuenta con cinco puntos de ventaja. La Juventus, su a priori rival por el trono doméstico, solo está un punto por detrás, pero la convincente victoria en Camp Nou ha inundado de sonrisas el presente turinés. Mientras las sombras se posan sobre el Inter, las luces acompañan a sus 'enemigos'.
Fantasmas pasados
En verano, la continuidad de Conte ya estuvo en entredicho, llegando a publicarse el precio que le costaría a la entidad lombarda despedirle (150 millones de euros). El final de temporada del club le hizo ganarse de nuevo la confianza y, aunque tras perder la final de la Europa League instaló la duda ("habrá que mirar por el bien del club, con o sin mí", "ha sido un año muy duro y todo tiene un límite"), finalmente decidió seguir adelante con el proyecto. Esta temporada se esperaban alegrías, pero el tran tran inicial no invitaba al optimismo. Sin Europa, demasiados pinchazos en competición doméstica vendrían acompañados de dudas pasadas. La tensión es patente, como se pudo observar en el enfrentamiento del técnico de Lecce con Fabio Capello tras el partido ante el Shakhtar, veremos la tensión de la cuerda en encuentros venideros.