El Racing aprovecha el confinamiento para recuperar a Figueras
El ilerdense, por rotura de fibras en un aductor, no juega un partido desde el 1 de noviembre y el plan es que esté disponible para jugar la Copa en Mutilva
Algo bueno ha tenido el parón al que se ha visto obligado el Racing por motivo del confinamiento que están debiendo guardar todos los componentes del primer equipo verdiblanco. Jordi Figueras, uno de los jugadores con más peso, futbolístico, en el equipo va a estar recuperado para poder jugar el próximo jueves frente al Mutilvera. El plan de recuperación de la rotura de fibras que padecía en el aductor medio de su pierna derecha pasaba por perderse los partidos frente al Sanse y estar disponible, aunque justo, para ir convocado contra el Real Unión. Con esos dos partidos aplazados, Figueras estará el domingo listo para entrenar al 100% con sus compañeros y disponible para que Rozada le incluya en la expedición del equipo que vaya a jugarse la eliminatoria copera el jueves 17, a Mutilva.
El central catalán ha jugado esta temporada, completos, los tres primeros partidos de liga y se ha perdido por lesión los duelos con el Laredo, el Barakaldo y el Leioa. El último encuentro que disputó fue el 1 de noviembre frente al Alavés B. Durante su ausencia, el puesto de central zurdo lo ha ocupado Óscar Gil, que ofreció un magnífico nivel, aunque en Sarriena fue baja por el fallecimiento de su abuela y debió sustituirle Alberto Villapalos, que también cumplió perfectamente.
Desde que fichó por el Racing, Figueras ha sufrido varias lesiones musculares, aunque nunca hasta ahora en el aductor, que han condicionado mucho su aportación al equipo, especialmente en la temporada de Segunda B. En esa campaña 18/19 padeció cuatro roturas fibrilares, dos de ellas con recaída en la rehabilitación, que le costaron no estar disponible en 18 de los 47 partidos que el Racing jugó esa temporada, incluido el de ida de la decisiva eliminatoria de ascenso frente al Atlético Baleares. En el de vuelta, en Son Malferit, no jugó, pero estuvo en el banquillo porque llegaba muy justo de su última lesión. La temporada pasada, en cambio, en Segunda, apenas tuvo un par de problemas físicos menores y pudo jugar en 35 de las 42 jornadas de Liga.