Pellicer: “Tenemos mucha rabia, ganar era una ilusión doble”
El técnico del Málaga lamentó la derrota de su equipo ante el Cartagena. Los blanquiazules dejaron escapar la oportunidad de colarse en los puestos de playoff.
Fuera de juego en el 1-1: “La pena es esa, esa acción esporádica. Habíamos empezado muy bien. El equipo estaba jugando, estaba buscando jugar de lado a lado, se encontraba cómodo. Nos adelantamos en el marcador. Más allá de la acción del empate hay que analizar el porqué de esa falta. Tras el empate nos ha costado, pero el equipo ha seguido creyendo. En la segunda parte, cuando íbamos a hacer los cambios, ha llegado el segundo gol. A partir de ahí, nos ha costado la primera presión en la segunda parte. No nos encontramos cómodos. Nos ha costado. El partido estaba controlado en la primera parte y una acción esporádica metió en el partido al rival. Se aferraron a cualquier estímulo positivo. El 1-2 les ha hecho creer, han seguido apretando. Hay que levantarse y más allá del acierto el equipo lo ha intentado con entrega y le ha faltado fortuna de cara a portería”.
Un año y nueve meses que no sufría el Málaga una remontada en casa: “Desde que estamos, es la primera vez que nos remontan en casa. Vamos a recordar de dónde venimos. Aquí pasamos del todo a la nada en 20 o 30 minutos. Cada partido es titánico y tiene unas circunstancias diferentes. En estas situaciones tenemos que darle mucho mérito a lo que hemos conseguido. Cada punto cuesta sudor y lágrimas. Tenemos un gran parte de guerra en esta maratón de partidos y tenemos menos cantidad de fichas profesionales, pero no es ninguna excusa. El segundo gol nos ha penalizado bastante, a nivel táctico y a nivel mental. Pero no podemos reprochar absolutamente nada a los jugadores ni nosotros. Esto nos tiene que servir de análisis para valorar cada victoria y cada punto que hacemos. En esta competición no hay diferencias. Las circunstancias son las que son, hay que levantarse y mantener el equilibrio. Nos está costando hacernos fuertes en nuestro estadio. Seguiremos trabajando. Cabeza arriba y a preparar el partido contra el Almería. El grupo está muy dolido. Sabíamos que ganar hoy era una ilusión doble, nos poníamos en una situación muy privilegiada. Esa rabia en el grupo nos hace ser optimistas. Son los primeros que están jodidos. Queda muchísimo y tenemos que valorar el día a día y estar menos acertados”.
Desajustes: “Pequeños errores nos están penalizando. Al ponernos por delante el partido estaba tremendamente controlado. Luego llega el empate en una falta y el que menos errores comete es el que se lleva el resultado. Cometimos los errores, el rival acertó y tenemos que insistir. Podemos entrar a analizar si es o no es fuera de juego, pero me quedo más en el análisis del desarrollo del juego. Hay que corregir esos errores para seguir sumando. Los errores nos han penalizado hoy en demasía”.
Malos números en La Rosaleda: “Las estadísticas están ahí. Nos está costando. El tema del público hace que no haya mucha diferencia entre jugar en casa y fuera. No estamos teniendo esa regularidad continua durante los 90 minutos y eso nos está penalizando. Tenemos que ser más consistentes y más organizados durante los 90 minutos. Hoy nos ha vuelto a penalizar una acción esporádica. Hay que tener esa concentración durante 90 minutos. La que estamos teniendo fuera de casa hay que mantenerla aquí en nuestro estadio. Hay que trabajar el aspecto mental, táctico, las situaciones del partido… Jugar como local te hace tener más ansiedad por conseguir los puntos. Tenemos que tener más equilibrio en todas las situaciones del partido. La clave es tener un equipo equilibrado durante los 90 minutos. Y en casa nos está costando”.
¿A quién de los que no estaba echó más en falta?: “Nunca echamos de menos a los que no están porque no pueden participar. No puede ser excusa porque llevamos 11 meses en esta situación. Es un mérito que salgan chavales jóvenes y puedan competir. Es un proceso de aprendizaje. No nos tenemos que quejar ni pensar en los que no están, sino en los que están y los que somos. Hay mirar hacia adelante y ser valientes. Es muy difícil en esta maratón tener la situación en la que estamos. Tiene mucho mérito el trabajo que está haciendo el grupo”.
El próximo partido, en ocho días: “Va a ser una semana normal, veremos a quién podemos recuperar. Y también servirá para recuperar la mente. Tenemos mucha rabia porque hoy teníamos muchísima ilusión. El grupo estaba muy responsabilizado, era un partido tremendamente importante para nosotros para marcar mucha distancia con la zona de abajo y situarnos en la zona de arriba. Ahora toca reactivarnos, recapacitar y mirar hacia adelante. Tenemos el partido del domingo contra un rival poderoso. Vamos a intentar competir como lo estamos haciendo. Lo más importante ahora es recuperar la mente y las piernas. Hay que trabajar y mirar hacia adelante porque esto no para. Luego vendrá la Copa y esto no acaba”.
