"Que la marcha de Messi era buena económicamente es una verdad como un templo"
El presidente de la Gestora del Barcelona no dio un paso atrás sobre Leo, matizando que "no hablaba de temas deportivos, sino simplemente de sumas y restas".
Carles Tusquets es de los que sale de un charco para meterse directamente en otro. El presidente de la Gestora del Barcelona quiso matizar sus declaraciones sobre la necesidad de vender a Leo Messi este verano a tenor de la reacción de Ronald Koeman en la que le pedía más mesura en sus afirmaciones, pero acabó metiéndose en un embrollo aún menor.
"Yo no dije que Messi tenía que haberse ido este verano. Dije que económicamente, mirando sólo los números, la economía del club estaría mejor, porque estamos hablando de la ficha más alta del mundo. Pero yo no soy nadie, además la decisión es suya y la Gestora no puede tomar una decisión. Creo que no dije nada del otro mundo. La decisión la tiene sólo Messi", empezó explicando Tusquets en una entrevista en el programa Tot Costa de Catalunya Ràdio.
Sin embargo, poco a poco, Tusquets se fue envalentonando: "Yo sólo hablé de números. Nada más. Ha habido una mala interpretación en mi respuesta. Es evidente que económicamente la marcha de Messi hubiera sido buena para el club. Es una verdad como un templo. Seguramente no tenía que haber respondido a la pregunta. El problema es que yo siempre respondo cuando me preguntan".
Respecto al enfado del técnico holandés, el presidente de la gestora aseveró que "Koeman tiene razón, pero no le han explicado bien mis palabras. Yo me limité a sumar y restar. Ni yo tengo voluntad de vender a Messi ni tampoco puedo hacerlo. Ya se lo diré a Koeman si hace falta. Le explicaré que se lo han explicado mal. Y si me llama Messi o su entorno, se lo aclararé también. En todo caso, ¿cómo se puede enfadar de una cosa que él quería hacer? Messi se quería ir del Barcelona este verano".
Tusquets intentó disipar asimismo las dudas que había sembrado él mismo respecto a las sospechas de algunas facturas que habían recibido y que no iban a pagar: "La Comisión Gestora está para hacer lo mínimo. Si hay unas facturas que no son imprescindibles para pagar ahora o no se han llevado un proceso adecuado, no las vamos a validar y las aplazamos para la junta entrante. No se trata en poner en sospecha las facturas. Si dije que no las veía claras, me expresé mal. No han seguido el recorrido normal. No tiene nada que ver con el Barçagate".
El presidente de la Gestora también intentó quitar dramatismo a la situación económica: "El futuro económico del club está más que garantizado. Cuando se abra el Camp Nou entrarán automáticamente 200 millones de euros. Me preocupa cero la situación económica".
Y, por último, reconoció que no está llevando bien la presión mediática que implica su cargo, hasta el punto de plantearse cerrar el grifo de entrevistas: "No lo estoy pasando bien. Es una presión diaria y difícil de asumir. Aún me sorprende que haya tantos precandidatos, no saben dónde se meten".