LOGROÑÉS 1 - SABADELL 0
Leo Ruiz vale por el cuarto triunfo seguido del Logroñés
El colombiano, autor de cuatro goles en tres de los últimos cuatro partidos, remató una magnífica jugada de Iñaki para conseguir el 1-0 sobre el Sabadell.
Cuarto triunfo consecutivo del Logroñés. Cuatro goles de Leo Ruiz en tres de esos cuatro choques. Desatado, el colombiano significa puntos. Casi nada para un recién ascendido. No tiene esa suerte el Sabadell, también procedente de Segunda B y el penúltimo de LaLiga SmartBank. Aunque no inquietó a Santamaría, su mejor oportunidad la estrelló Édgar en el larguero. Una excelente incursión por la izquierda de Iñaki, en su partido número 200 con el club, la remató Ruiz al primer toque en el 82’. Los blanquirrojos no paran de crecer desde la solidez defensiva (llevan sin encajar más de 270 minutos) y el acierto de sus atacantes (ya han marcado Leo, Roni y Vitoria).
El Logroñés intentó dominar de inicio. Achuchó arriba y combinó paciencia en el toque y juego directo, con Rubén y Paulino abiertos en las bandas, con las incorporaciones de Iñaki y con Andy encargado de la salida del balón. Paulino, muy incisivo, centró mal a Leo Ruiz tras un buen eslalon entre la defensa del Sabadell. Luego probó desde la frontal, sin problemas para Mackay. Su hiperactividad no tuvo recompensa y, peor, se lesionó antes del descanso.
El equipo arlequinado abusó de las pelotas colgadas a Édgar, pero llegó con peligro en cuanto se sacudió la presión y encontró a Stoichkov. Un pase atrás del gaditano lo sacó Iñaki cuando Óscar Rubio esperaba para empujarla. Otro despeje, de Édgar a la cabeza de Olaetxea dentro del área, involuntario, lo reclamó el banquillo local antes de que terminara la primera mitad.
La segunda arrancó con intercambio de golpes: metafóricos, con ocasiones para Andy y Édgar, y literales, con duras acciones de Grego Sierra y Gorka Pérez. Ángel estuvo a punto de dejar con diez al Sabadell, aunque Ortiz Arias dio la ley de la ventaja y se olvidó de sancionar la segunda amarilla, pese a echarse la mano al bolsillo. El conjunto catalán ganó metros y empezó a sentirse cómodo. Una falta lateral, ejecutada directamente a puerta por Édgar, pegó en el travesaño en el 69’. El Logroñés sólo generó a balón parado, pero con poco, y tan difícil como lograr una efectividad máxima, mata a sus rivales. Lo sufrieron antes Almería, Oviedo, Alcorcón y Cartagena. Ocurrió gracias a la conexión entre Iñaki y Leo Ruiz. De hecho, dormirá más cerca del playoff de ascenso a Primera (a dos puntos) que de la zona de descenso (siete por encima). El Sabadell deberá remar si no quiere quedarse descolgado.