Pogba pasa a un segundo plano
El francés ha pasado de fichaje estrella y niño mimado del United a actor secundario. Apenas ha jugado 527 minutos, dando dos asistencias y anotando un gol. Eso sí, al Luton en Copa.
De piedra angular, fichaje estrella y niño mimado del Manchester United, a actor secundario. A Paul Pogba ya nadie le va a poner un grillete en el pie, ni tampoco un cheque un blanco, para que no abandone Old Trafford. Cuatro años y medio después de su histórico fichaje desde la Juventus, y tras infinitos coqueteos con el Real Madrid (el último hace un mes), el mediocentro campeón del mundo con Francia ha pasado, sin ser por castigo ni lesión, a un segundo plano del que tiene que intentar salir quiera abandonar los red devils este verano o no.
En total, el espigado jugador galo apenas ha jugado 527 minutos de los 1.080 que ha disputado el United esta temporada. En ellos, apenas dos asistencias y un gol, por cierto, al Luton en Copa. Además, analizando esos minutos, puede verse que el jugador solo jugó el partido completo ante dos grandes, el Tottenham y el Arsenal, que le endosaron a los mancunianos un 1-6 y un 0-1 respectivamente. En el empate contra el Chelsea apenas participó 32 minutos y en la victoria ante el Everton sólo 8.
No parece haber discusión por tanto sobre que Bruno Fernandes, y no él, es la estrella del centro del campo, por lo que Solskjaer prefiere acompañarle de dos escuderos como Fred y McTominay que permitan al portugués brillar y engrasar la maquinaría ofensiva de los red devils. La duda está, por tanto, en si un jugador que costó más de 100 millones de euros puede dar la vuelta a esta situación y si debe aceptarla o intentar empezar de cero en otro lado. Jamie Carragher, por ejemplo, lo tiene claro.
“Creo que, de una u otra forma, todo el mundo está descontento con su situación. Sólo el hecho de que cuatro años y medio después sigamos hablando del tema ya indica que no ha sido los suficientemente bueno en distintos esquemas. ¿Qué si pondría yo a Pogba ahora mismo en el equipo? No, la verdad. No creo que sea un gran jugador, ya lo he dicho antes, yo pensaba que podía marcar la diferencia como lo hicieron Lampard en el Chelsea, Gerrard en el Liverpool o Yaya Touré en el Manchester City. Eso es lo que se nos dijo que conseguiría cuando se le convirtió en el jugador más caro de la historia”, explica el exjugador red en 'TalkSport'.