Chavarría mata al Sabadell
Su gol mató a un equipo que acusó el cansancio en la segunda mitad. El Málaga fue superior en la mayor parte del encuento. El árbitro expulsó a Hidalgo.
Todos en Sabadell saben que la Segunda es dura, que ningún partido será sencillo y que sumar tres puntos, en esta categoría, requiere un esfuerzo inmenso. Se lo demostró el jueves el Almería y hoy un Málaga bien plantado y, sobre todo, solvente. Golpeó dos veces, una por parte, y se cerró con criterio. Tres puntos trabajados para los malaguistas, que vuelven a ganar tras tres partidos sin hacerlo.
El fulgurante inicio del Málaga no encontró el gol hasta el minuto 16, pero poco le faltó para hallarlo antes. A los 40 segundos de partido Pablo Chavarría desaprovechó una acción clarísima, pese a que la intervención de Mackay fue también de mérito. En seis minutos habían rondado con peligro el área arlequinada dos veces más y del Sabadell no se tuvieron noticias hasta el 14', cuando Néstor disparó por primera vez a puerta.
Dos grandes goles
En los minutos siguientes, antes del 20', los pocos privilegiados que asistieron a la Nova Creu Alta pudieron disfrutar de dos golazos, uno por equipo, en dos jugadas consecutivas. Acertó primero el Málaga, concretamente Calero, que atrajo a dos rivales, buscó la pared con Jairo y recordó al mejor Henry en su definición: con el interior, con rosca, al palo largo del portero. El del Sabadell lo firmó Néstor con un magnífico remate de cabeza, imposible para Dani Barrio, tras un excelente centro de Ozkoidi.
El Málaga siguió mejor plantado sobre el césped, encerrando al Sabadell en su campo. Julio Martínez fue uno de los que más problemas le generó a los arlequinados, que trataron de salir muy verticales, con transiciones rápidas, siempre que robaron el balón. Néstor y Stoichkov obligaron a Dani Barrio a intervenir y los locales ganaron confianza y balón. La banda izquierda, con Ozkoidi muy activo, fue una mina para el Sabadell.
La puntilla
Ya con menos minutos por disputar ambos equipos fueron menos valientes, menos ofensivos y, por lo general, pisaron menos el área contraria. Se intercambiaron el balón en el centro del campo en una contienda que se mantuvo abierta, pero sin la alegría ofensiva de la primera mitad.
El Málaga fue el primero en agitar el equipo y consiguió ponerse el partido muy de cara. Sin agobiar al rival sí dio un paso adelante a partir del minuto 60', culminado en el gol de Chavarría, que remató demasiado cómodo entre los centrales arlequinados. A partir de ahí, como es lógico, el Málaga se protegió. Se jugó poco entre cambios, amarillas y lesiones, lo que lógicamente benefició al Málaga. El cansancio de los arlequinados, que jugaron el jueves, pesó en los últimos minutos: cambios como los de Grego o Stoichkov, más que tácticos, fueron por la acumulación de minutos. La desesperación del Sabadell acabó, tras siete minutos de añadido, con su derrota y la expulsión de Hidalgo.