El Marsella sale airoso de una situación límite en Estrasburgo
El equipo que dirige André Villas-Boas venció por la mínima a un equipo que le puso contra las cuerdas, en otra demostración de supervivencia del conjunto marsellés.
Con un gol de Sanson de bella factura en la segunda parte, el Olympique de Marsella venció por la mínima en su visita al campo del Estrasburgo. Fue el único disparo que el conjunto marsellés realizó en los 90 minutos en un partido en el que, más allá del resultado, la dificultad para generar ocasiones y la falta de profundidad pudieron costarle un disgusto.
En una semana muy complicada por la derrota del martes en Porto, el Marsella buscaba recuperar sensaciones. El equipo de André Villas-Boas, sorprendente segundo clasificado la temporada pasada en la Ligue 1, está teniendo dificultades para sacar adelante sus partidos y más con una plantilla que no tiene profundidad para disputar tres competiciones. El portugués, muy criticado por sus últimos planteamientos en Copa de Europa, volvió a jugar con un rombo en 4-4-2 con las novedades de Germain, Cuisance y Gueye, estos dos últimos en el centro del campo.
El Olympique de Marsella volvió a mostrar las mismas debilidades que en la Champions League. Resulta extraño que un equipo con tanto talento en el centro del campo fuera incapaz de disparar a puerta en 45 minutos en Estrasburgo. Fue un primer acto equiparable al frío de Alsacia, con dos equipos especulando y sin tomar riesgos. No obstante, los locales sí que propusieron algo más que su rival a través de envíos en largo para Habib Diallo. El exjugador del Metz, pretendido por el Tottenham durante el pasado mercado de invierno, fue un incordio para Caleta-Car y Belardi, pero sin materializarse en ocasiones claras.
La segunda parte sirvió para engrandecer todavía más la capacidad de supervivencia del Olympique de Marsella en situaciones límite. Nadie sabe cómo ni porqué, pero el conjunto marsellés sigue sacando resultados positivos casi sin quererlo. Porque, justo cuando el Estrasburgo estaba viviendo su mejor momento del partido, incluyendo un disparo al larguero de Caci que pusieron todavía más contra las cuerdas al OM, Morgan Sanson se sacó de la manga un remate espectacular en la frontal en una jugada totalmente aislada que acabó con el balón en la escuadra. Fue el último letargo de un partido muy pobre para el espectador y que acabó como casi siempre, con victoria del Marsella por la mínima.