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LEVANTE

El 'Comandante' de hierro

José Luis Morales tan sólo se ha perdido tres encuentros por lesión a lo largo de su carrera. Fue en su cesión en el Eibar, en 2014.

26/10/20 PARTIDO PRIMERA DIVISION 
 LEVANTE - CELTA DE VIGO
 MORALES
DAVID GONZALEZDIARIO AS

José Luis Morales está hecho de otra pasta. A sus 33 años, el 'Comandante' tan sólo se ha perdido tres encuentros por lesión a lo largo de su carrera. Fue en marzo de 2014, en su etapa como cedido en el Eibar. Desde entonces, el madrileño no ha solicitado la baja por motivos médicos, superando pequeñas dolencias en tiempo récord. Nada grave. Sin duda, uno de los secretos para mantener el nivel a su edad con una genética privilegiada.

La lesión de tobillo de Morales podría suponer la primera ausencia médica del atacante en sus siete temporadas en Orriols. Sus únicas bajas se han dado por descanso, decisión técnica o sanción como granota. El curso pasado, sin ir más lejos, fue junto a Jesús Navas e Iñaki Williams el único jugador de campo que participó en todos los partidos de LaLiga.

Sin embargo, los tobillos han sido la única articulación que le han puesto en jaque a lo largo de su trayectoria. Fue el motivo de su ausencia durante tres partidos en Eibar por un esguince Grado 2-3 sufrido frente al Alcorcón. Su único paso por la enfermería durante varias jornadas en sus ocho cursos como profesional.

También en la 2018-19, en la víspera del transcendental encuentro frente al Rayo Vallecano de la penúltima jornada de campeonato, con la permanencia en juego, Morales sufrió un doble esguince en una sesión de trabajo en Buñol.

Su participación era un quimera, pero tras una semana de cuidados, e infiltración mediante, el '11' granota disputó 87 minutos en el Ciutat. Lo mismo podría ocurrir frente al Granada. La siguiente jornada, en Girona, sería clave con su único gol de cabeza en su carrera para certificar el objetivo.

Habrá que esperar a la evolución del esguince y la contusión en su tobillo derecho tras impactar con dureza con Murillo, sin un tiempo de baja predeterminado. Todo queda al desarrollo de la dolencia y la voluntad del jugador, que ya ha demostrado en más de una ocasión su compromiso y su predisposición a aguantar el dolor. No obstante, sin urgencias, podría volver frente al Alavés en el regreso al renovado Ciutat de València. Un bonito reencuentro.