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ALEMANIA

El Dortmund da la puntilla al Schalke

El derbi del Ruhr sitúa a los de Lucien Favre segundos en la clasificación, empatados a doce puntos con el Bayern. El Schalke se queda penúltimo con tan solo un punto en el casillero.

Gol de Matt Hummels
LEON KUEGELER / POOLEFE

Sigue la caída libre del Schalke, que sufrió un nuevo varapalo, esta vez en el derbi del Ruhr ante el Borussia Dortmund, en una temporada que está siendo una verdadera pesadilla para el cuadro dirigido por Manuel Baum. Después de una primera mitad en la que logró contener el poderío en ataque del BVB, los mineros se desmoronaron en la segunda y terminaron encajando una durísima derrota por 3-0. Gloria para un Dortmund que iguala a puntos al Bayern en segunda posición de la clasificación en la Bundesliga, dolor para un Schalke que sigue penúltimo con tan solo un punto en el casillero después de cinco jornadas. La crisis es mayúscula.

Fue superior el Dortmund desde el inicio, eso sí, sin poner en serios apuros a la retaguardia del Schalke. Llegaban con cierta comodidad al área del eterno rival los pupilos de Favre que, en los últimos metros, no encontraban soluciones ante un cuadro minero replegado a la perfección. Haaland y Sancho no podían moverse con libertad, por lo que las ocasiones más peligrosas por parte del BVB en los primeros 45 minutos del choque en el Signal Iduna Park (con unos pocos hinchas en las gradas) fueron un mano a mano de Meunier con Rönnow y un disparo de Dahoud que se estrelló en el travesaño.

La cosa cambió a los diez minutos de la segunda mitad, cuando el meta visitante no pudo atrapar un disparo de Guerreiro. El rechace cayó en los pies de Akanji, que, finalmente, puso por delante en el marcador a los suyos de manera muy merecida. El Schalke fue con todo a por el empate y concedió espacios, lo que supo aprovechar Haaland recibiendo un envío de Sancho en profundidad y superando a Rönnow con una sutil vaselina. El noruego perdonó el segundo, Hummels no. El central cabeceó un córner hacia el fondo de la red, poniendo el broche de oro a un derbi del Ruhr que deja al Schalke en escombros.