Araujo regresa de sus cenizas
El delantero argentino, con un doblete ante al Almería este sábado, hace rememorar sus mejores tiempos de amarillo después de años de decepciones.
Como si de un milagro se tratara o de si todavía al despertar este domingo alguien no se lo creyera y hubiera que tocar madera antes de hablar de ello, el héroe del último ascenso de los insulares a Primera División, Sergio Araujo, parece haber vuelto por sus fueros tras sus últimos dos fogonazos en el día de ayer en el Estadio de Gran Canaria. Sin duda, unos goles marca de la casa que hacen que el aficionado se ilusione con un jugador al que se le tiene mucho cariño en la grada, ahora vacía, por aquella gesta, pero que lleva muchos años incómodo en la isla, buscando su salida continua en forma de cesión al AEK de Atenas.
Ahora, en esta nueva UD confeccionada por Luis Helguera y Tino Luis, basada en la juventud, el hambre y la lucha, el Chino ha mostrado su compromiso con el proyecto desde el minuto uno que se le ha visto en el terreno de juego y ayer ante el Almería confirmó las buenas sensaciones que venía mostrando las semanas anteriores, junto con el gol de hace dos jornadas ante el Logroñés.
Tan buena fue su actuación en el encuentro que hasta el propio Pepe Mel destacó en la rueda de prensa que Araujo “ha visto que tenemos un equipo joven, que mete el pie y no se puede relajar. Araujo se ha subido al carro y está tirando de él", comentando además que "este es el primer año que yo lo tengo, porque cuando llegué jugó conmigo el primer partido, hizo una primera parte espectacular y se lesionó para toda la temporada. Luego en pretemporada se lesionó, lo perdimos y cuando se recuperó se fue a Grecia. Es decir, cuando lo tengo por primera vez es ahora”.
Hay que recordar que el argentino se lesionó un 31 de julio del año 2019 durante un partido amistoso de Las Palmas frente al Cádiz en el estadio de La Línea de la Concepción, en el que supuestamente solo tenía una lesión leve en el tobillo y, sin embargo, se le acabó realizando una artroscopia para revisión articular y una reparación del ligamento deltoideo y sindesmosis del tobillo izquierdo, que le acabó dejando sin jugar hasta diciembre. Finalmente disputó cuatro partidos con los amarillos hasta que acabó cedido en el AEK de Atenas hasta junio, disputando 19 encuentros, en los que anotó solo tres goles.
Esta pretemporada también tendría otro contratiempo al dar positivo de la Covid-19 a mediados de agosto, por lo que tuvo que ser aislado durante dos semanas, después no pudo ser convocado ante el Leganés al no llegar en forma a dicha cita, pero ya acumula los mismos tantos que la temporada pasada en solo cinco partidos, con tres dianas cada 78 minutos.
“Ahora todo me sale bien, así que espero seguir marcando goles porque es lo que la gente quiere. Lo cierto es que tengo algo de suerte”, dijo el propio Araujo al acabar el partido.
Lo que está claro es que si el Chino realmente está de vuelta, la UD puede aspirar a algo más que a conformarse con la mitad de tabla y, si está centrado y tiene confianza, es un jugador del que Gran Canaria sabe de lo que es capaz con el viento a favor.
La UD echa el cerrojo y no perdona a los rivales
El equipo amarillo ha ido mutando con el paso de las jornadas al conjunto más goleador de la categoría, actualmente con nueve goles, uno más que el Fuenlabrada y dos más que el Rayo Vallecano y Ponferradina (ambos con siete, pero con un partido menos), y al mismo tiempo a uno de los equipos más sólidos en defensa, con dos partidos consecutivos sin permitir que el equipo rival consiga sobrepasar los dominios de Álvaro Valles.
Cada partido que pasa, se vislumbra la UD Las Palmas que Pepe Mel quiere en el terreno de juego. Una plantilla que presiona, que aprieta y que pone una intensidad que asfixia al contrario en campo ajeno para rápidamente organizar una jugada de ataque. Ahí están las nuevas claves de la escasez de ocasiones recibidas en las últimas jornadas por parte de los rivales. Esta nueva UD apenas defiende en área propia, sino más bien con las líneas adelantadas para evitar parapetarse en torno a su guardameta. Sin duda, la varita del técnico madrileño está dando con la tecla, con solo un gol recibido en los últimos tres encuentros, aquel sufrido el pasado tres de octubre ante el Logroñés por un riguroso penalti pitado a Eric Curbelo en los minutos finales del partido.
El Almería, por ejemplo, apenas puso en aprietos a Valles en el encuentro de ayer y el Málaga la pasada semana, con más de 50 minutos con un jugador más por la expulsión de Álex Suárez, tampoco inquietó a la retaguardia amarilla, por lo que, si a ese cóctel de buen hacer defensivo se le suma la chispa de gol que están teniendo los insulares en este inicio de campeonato, estamos ante un "equipo va a más y el equipo me transmite tranquilidad. El miércoles no sé lo que va a pasar, lo único que sé es que mi equipo va a competir", como dijo el propio Pepe Mel en la rueda de prensa posterior al encuentro de este sábado pensando ya en la cita ante el CD Castellón del miércoles a las 18.00 h.c.