Odegaard crea, Haaland arrolla

Sólo unos días después de quedarse fuera de la Eurocopa, Noruega se dio un festín goleador ante Rumanía y pasó a liderar su grupo en la División B de la Liga de Naciones. El partido fue una nueva demostración de que con Odegaard y Haaland, además de Sorloth, los noruegos tienen derecho a soñar. No será en la siguiente Euro, pero sí en los posteriores grandes torneos. Seguro.

Porque la facilidad con la que pasaron por encima de los rumanos les vuelve a presentar como un conjunto trepidante con espacios por delante. Ahí sobresale la figura de Haaland, que volvió a darse un homenaje anotando tres goles que pudieron ser muchos más. Su socio ideal fue Odegaard. El madridista le asistió en sus dos primeros tantos. El inicial, en la primera mitad, fue tras un preciso pase en profunidad que el del Dortmund aprovechó devorando metros como siempre hace. El otro, ya en la segunda mitad, fue un regalo en el área pequeña. Antes del descanso, Sorloth había puesto más ventaja aún en el marcador.

Las ganas de reivindicarse hicieron que Noruega no bajase los brazos ni con la victoria asegurada. Así, Haaland coronó su gran partido con un tercer tanto, el cuarto del partido, tras un zurdazo desde fuera del área. Un ejercicio de pegada con el que sobresalir aún más en el fútbol continental. No estarán los noruegos en la Euro, pero su nivel está fuera de toda duda. Les falta un poco más de madurez para alcanzar definitivamente la élite europea.