Orinar en el campo le sale muy caro a un jugador norirlandés
Al delantero del Coleraine Football Club, Eoin Bradley, le han sancionado con seis partidos y ha recibido ataques en redes sociales donde se le recrimina su conducta.
El jugador estrella del Coleraine Football Club, Eoin Bradley, no pudo aguantar toda la cantidad de líquido que su cuerpo contenía mientras correteaba en una semifinal de la Copa Irlanda del Norte, que se disputaba en el estadio Windsor Park de Belfast el pasado julio. Su gol frente al Ballymena United que igualaba el encuentro quedó relegado a un segundo plano. La prórroga se acercaba, pero Bradley no pudo más y la imposibilidad de ir a los vestuarios debido al protocolo de la covid-19 obligó al ariete a orinar en mitad del encuentro. Un acto que le ha salido muy caro: la Federación norirlandesa le ha sancionado con seis partidos de suspensión y en redes sociales el futbolista se ha visto sometido a una serie de críticas sectarias.
La Federación ha hecho oficial este martes el castigo a Eoin Bradley. El organismo considera que ha infringido el artículo 17, el que castiga las acciones "que desacreditan el juego", según dice el comunicado.
El calvario de Bradley no solo se limita a los despachos de la Federación norirlandesa sino que también las redes sociales han criticado con dureza al futbolista, católico, por haber "profanado un templo del balompié irlandés". Además, han tiltado su comportamiento de "típico de un Fenian", un término despectivo hacia la comunidad católica-nacionalista de la provincia británica.
El delantero no tardó en responder para defenderse de las acusaciones. "Sí, he meado en Windsor. Sí, soy un Fenian/Católico. Algunos de mis mejores amigos son protestantes. ¿Y qué? Es 2020. Madurad", escribió Bradley.