La predicción de 2014 que todavía persigue a Mourinho
Durante su segunda etapa en el Chelsea, el técnico luso dio por descontado que Baker, Brown y Solanke, promesas de los Blues, serían internacionales en pocos años.
En plena pretemporada de 2014, José Mourinho, por entonces entrenador del Chelsea en su segunda etapa, dio una de esas ruedas de prensa que se recuerdan con el paso de los años. En aquel momento ya se hablaba de la nueva generación de canteranos del Chelsea, esa misma que hoy ya asoma y se instala en el primer equipo: junto a los Mason Mount, Tammy Abraham, Andreas Christensen o Fikayo Tomori, había otros a los que también se les esperaba en la élite. Era una hornada de futbolistas muy prometedores todos ellos, que no paraban de ganar en categorías inferiores, no sólo en Inglaterra sino también en Europa. Y Mourinho se llevó a muchos de ellos a hacer la pretemporada con el primer equipo.
Fue allí cuando Mourinho soltó una predicción que puso las expectativas muy altas: "Mi conciencia me dice que si, por ejemplo, Baker, Brown y Solanke no son internacionales en unos años, debería culparme a mí mismo", dijo el portugués. Y añadió: "Son parte de un proceso que el club empezó sin mí. En este momento, tenemos jugadores que serán futbolistas del Chelsea. Y cuando sean futbolistas del Chelsea, serán internacionales, casi seguro. Con 16 y 17 años no creo que sea bueno que se vayan a jugar cedidos a otro sitio. Con 16 y 17 tienen que entrenar con nosotros y aprender con nosotros".
Seis años más tarde, la predicción está lejos de cumplirse. Izzy Brown (23 años) y Lewis Baker (25 años) siguen teniendo contrato con los 'blues', pero entre ambos sólo han jugado un partido con el primer equipo desde aquellas declaraciones: los 11 minutos de Brown de la penúltima jornada de la Premier en 2015, con el Chelsea ya campeón. De hecho, Lewis Baker suma un total de ocho cesiones en todo este tiempo (Sheffield Wednesday, MK Dons, Vitesse, Middlesbrough, Leeds, Reading, Fortuna Düsseldorf y, desde la semana pasada, Trabzonspor), mientras que Izzy Brown acumula siete (Vitesse, Rotherham, Huddersfield, Brighton, Leeds, Luton, Sheffield Wednesday).
Un caso diferente es el de Dominic Solanke (23 años), pura efectividad y elegancia en categorías inferiores, el culpable de que Tammy Abraham siempre fuera un paso por atrás en la cantera del Chelsea. Solanke sólo jugó un partido con el primer equipo, salió un año cedido al Vitesse y nunca se puso de acuerdo para renovar en Stamford Bridge. Tras un año en el limbo sin apenas jugar, fichó por el Liverpool y ahora está en el Bournemouth, en Championship, que pagó 20 millones de libras por él. Incluso llegó a debutar con la selección inglesa en un amistoso. Solanke lleva 63 partidos en la Premier League y 5 goles, una cifra que pocos se podían imaginar hace unos años.