Roberto López: de probar con el Liverpool a estrenarse en Valladolid
Probó con el campeón de la Premier League siendo cadete. La Real lo reclutó con 15 años gracias a un ojeador y ha crecido de la mano de Imanol Alguacil.
Roberto López Alcaide se ha ganado el cariño y el respeto de todos en Zubieta. Desde que ingresara con 15 años en la cantera de la Real Sociedad, no ha parado de crecer hasta tocar el cielo con su primer gol en Primera división este pasado domingo en Valladolid, en el que fue su primer partido como titular en la máxima categoría. Pero este mediapunta natural de Zaragoza (24/4/2000) podía haber estado jugando ahora con el campeón de la Premier League.
Porque antes de llegar a San Sebastián, siendo un chaval de la categoría cadete, fue reclutado por un ojeador para que hiciera una prueba en la academia de formación del Liverpool. No lo vio claro la familia de Roberto López aquello de tener que trasladarse a Inglaterra con 14 años, y tampoco pasó el corte de los ‘red’. Pero apareció la Real Sociedad, que en los últimos años ha estado atenta a este tipo de oportunidades con los jóvenes, y tras conocerle y probarle, no dudó en hacerle un planteamiento de formación.
Con 15 años, Roberto López ingresó en la estructura de Zubieta, con un planteamiento muy claro. Lo normal es que el maño hubiera formado parte de la del Real Zaragoza, porque su formación en el fútbol al aire libre comenzó en la Unión Deportiva Amistad, una cantera formativa anexa al Zaragoza. Pero nunca llegó a jugar con el equipo de su ciudad natal. No se fijaron como lo hizo la Real, que sí apostó por su futuro. Y ya en Zubieta redobló su apuesta con su renovación hasta 2025 en 2018, dándole un estatus de proyecto de jugador del primer equipo, junto a Ander Barrenetxea.
Pero es que Roberto López pudo haber sido también jugador de fútbol sala. Porque sus inicios los hizo con cinco años en el colegio Hilarión Gimeno del barrio zaragozano La Jota. Pero estaba destinado a brilla en los grandes estadios del fútbol nacional. Lo que nunca imaginó es que sería vestido de txuri-urdin. Pero su camino hace cinco años le llevó a Donostia. Y en Zubieta encontró a su gran valedor, Imanol Alguacil: fue el entrenador que le hizo despuntar en Segunda B siendo técnico del filial y que ahora le ha dado su primera gran oportunidad de despuntar en Primera. Con el oriotarra ya había debutado en Primera el 14 de enero de 2019 contra el Espanyol en Anoeta.
Internacional con España sub-19, su primera gran temporada en la Real fue con el división del honor juvenil en la temporada 2017-18, lo que le permitió ser llamado por Santi Denia para la selección juvenil. Con Imanol Alguacil en el filial despuntó hasta el punto de lograr la renovación con la Real hasta 2025, con una promesa escrita en su nuevo contrato, que en 2020, cuando tuviera 20 amos, tenía que formar parte del primer equipo o ser cedido a un equipo de Segunda. No podía volver al filial.
Y entonces ha llegado la nueva apuesta de la Real por el maño: le han hecho ficha del primer equipo siendo jugador a todos los efectos de la plantilla profesional. Y en ese contexto llegó su estreno goleador en Primera, con la inestimable ayuda de Masip. Marcó de falta, una de sus especialidades, aunque el portero del Valladolid ‘cantó’ de forma clamorosa. Su crecimiento en Zubieta ha sido tan grande que se ha ganado a pulso el cariñoso mote de ‘Superlopez’. El futuro es suyo. Su carrera no ha hecho más que despegar.