Hace dos años la selección americana vivió una de las mayores humillaciones al caer contra Trinidad y Tobago. Ahora los jóvenes desde Europa desvuelven la ilusión.
Hace dos años la Selección de Estados Unidos vivía una de los mayores fracasos de su historia al caer ante Trinidad y Tobago (2-1) en la fase de clasificación y quedar fuera del Mundial de Rusia. Las Barras y las Estrellas no se veían fuera de un campeonato del mundo desde 1986. Un batacazo enorme. Sobre todo si se comparaba en el país con el éxito abrumador de los últimos años de la selección femenina, campeona del mundo tanto en Canadá 2015 como en Francia 2019.
Dos años después parece que los jóvenes han devuelto la ilusión a EE UU con su selección masculina. Hay varios jugadores que militan con éxito en Europa y que hacen se vuelta a soñar en grande. Weston McKennie es el último americano que se une a un gran equipo del viejo continente. A sus 22 años, acaba de recalar en las filas de la Juventus cedido por el Schalke con opción de contra. Un centrocampista con altura y potencia, que puede crecer más aún dirigido por el maestro Pirlo.