Depay-Immobile, fuego abierto

Partido grande en Ámsterdam entre dos selecciones que no estuvieron en el último Mundial. Paradójico, pero cierto. Holanda e Italia están en pleno proceso de reconstrucción y se enfrentan en la Liga de Naciones, ese invento de la UEFA que si para algo sirve es para que países en crisis de selección como el holandés o el italiano tengan partidos para recuperar el rumbo.

Lo hizo Holanda en la anterior edición, en la que fue finalista, y esa buena inercia con Koeman en el banquillo conllevó también la posterior clasificación para la Euro. Ya no está a los mandos el actual técnico del Barça, pero su legado continúa. No hay más que comprobar el gran partido de Frenkie de Jong, uno de sus inventos, ante Polonia el otro día.

Lodeweges, el técnico interino de la 'oranje', deberá continuar con el encaje de bolillos en defensa (no están Dumfries, De Ligt ni Blind) y volverá a fiarlo todo al mago Depay, cuyo estado de confianza es de crack mundial. No es de extrañar que tanto a él como a Wijnaldum los esté siguiendo el Barça.

Invictos en 13 partidos

Los italianos están también reencontrandose consigo mismos, aunque su proceso parece aún más verde. Dejaron una estupenda fase de clasificación para la Euro y acumulan ya 13 partidos sin perder. Con Mancini estaba asegurada la regularidad ante selecciones modestas y falta dar un paso al frente ante las grandes, para lo que será fundamental acoplar a los jugadores de buen pie que han ido saliendo últimamente: Sensi, Barella, Pelegrini, Zaniolo...

Por si fuera poco, el técnico puede recuperar para hoy al Bota de Oro europeo, Ciro Immobile, tras haber optado, sin éxito, por Belotti en el decepcionante empate ante Bosnia de la primera jornada. También Zaniolo entraría por Chiesa, además del inagotable Chiellini en defensa en lugar de Acerbi. Un Holanda-Italia siempre suena a rondas finales de Eurocopas o Mundiales, aunque sea parte de la Liga de Naciones y los dos equipos estén en construcción. Un lujo para la vuelta del fútbol de selecciones.