Trippier y Lodi, entre los grandes centradores de la Champions
Los dos laterales del Atlético están en el top ten de la competición en esta categoría. Los rojiblancos son el único club que tiene dos representantes.
Con la conclusión de la Champions, con el Bayern de Múnich como campeón, llega el momento de repasar las estadísticas de la competición en busca de los mejores jugadores en cada categoría. Hay varios apartados en los que los jugadores del Atlético están en los puestos de privilegio de la Champions. Por ejemplo, en el de los centros. Y es que hay dos miembros de la plantilla rojiblanca en el top 10 de este ranking: Trippier y Lodi, los habituales laterales titulares en las alineaciones de Simeone.
Tanto el inglés como el brasileño han cerrado la Champions situados entre los jugadores con más centros de la máxima competición continental. En concreto, Lodi ha sido el sexto jugador que más ha sumado, con 45, y Trippier ha sido décimo, con 40, empatado con Grimaldo, del Benfica. El podio lo componen Alexander-Arnold, del Liverpool, con 77, seguido de Kimmich, del Bayern de Múnich, con 74, y De Bruyne, del Manchester City, con 61. Un aspecto a destacar es que el Atlético es el único club de todos los participantes en esta edición de la Champions que tiene dos jugadores entre los 10 mejores en esta estadística.
Trippier y Lodi llegaron esta temporada a la disciplina colchonera procedentes del Tottenham y el Atlético Paranaense, respectivamente, y ambos se han consolidado como jugadores importantes para el Cholo. El primero ha jugado 2730’ repartidos en 33 partidos entre todas las competiciones, en los que ha dado cinco asistencias, mientras que el segundo ha sumado 3317’ en 43 partidos, anotando un gol y sirviendo tres a sus compañeros.
La forma de jugar del Atlético favorece que Trippier y Lodi sumen buenos datos en el apartado de envíos al área en la mayoría de los partidos. Y es que Simeone utiliza habitualmente a Koke (y con frecuencia a Correa) en las bandas y ambos son jugadores más acostumbrados a jugar en posiciones interiores y, por tanto, tienden a ir hacia dentro en vez de quedarse fijos en su zona. Eso hace que los laterales puedan subir constantemente sus carriles y llegar a línea de fondo, pudiendo centrar con frecuencia al área en busca del remate de algún compañero.