El 'MLS Is Back' marca el camino
Después de 34 días y 51 partidos, el experimento de la MLS en el complejo de Disney ha llegado a su fin con muchas más luces que sombras.
El 8 de julio arrancó uno de los mayores experimentos en el mundo, no sólo del fútbol profesional, sino de todos los deportes. Y es que la MLS, ante la casi irremediable situación de tener que reanudar su competición, decidió realizarlo de una forma un tanto especial. Debido a lo afectado que estaba -y sigue estando- Estados Unidos a causa del COVID-19, la liga, de la mano del comisionado Don Garber, apostó por crear un torneo en Orlando, exactamente en el Wide World Complexo of Sports de Disney, donde formarían una burbuja con las 26 franquicias. Todo esto teniendo en cuenta que sería la primera de las grandes ligas del país en retomar la actividad (muchas de ellas por cuestiones de calendario), por delante de la NBA, que terminó por seguir su mismo modelo, la MLB o la NHL.
Precisamente, este no tenía nada que ver con la temporada regular que ya había dado, como siempre, su pistoletazo de salida en la primera semana de marzo y que por la pandemia tuvo que frenarse con apenas dos jornadas disputadas. Por ello, pensaron formar un torneo dividido en dos claras partes: primero se disputaría una fase de grupos, con tres partidos cada equipo, los que contarían de facto en la puntuación de la ‘Regular Season’. De ese modo querían asegurarse de premiar de alguna forma a aquellos que fuesen mejores en dicha parte de la competición. Mientras que, por otro lado, una vez clasificados de ronda, se pasarían a unos Playoffs que irían de los octavos hasta la final, con un premio para el campeón de cerca de 900 mil euros, además de un billete para la próxima edición de la CONCACAF Champions League, el cual se terminó embolsando Portland Timbers al derrotar a Orlando City.
Sin embargo, todos estos planes estuvieron cerca de truncarse a pocos días del estreno. Y es que tanto FC Dallas (diez contagiados) como Nashville SC (otros nueve positivos) tuvieron que verse obligados a abandonar el torneo ante la imposibilidad de competir y, sobre todo, el peligro de expandir el virus por el complejo. Esto produjo retraso de fechas, reestructurar algunos grupos (Chicago Fire tuvo que pasar del A al B)… Un cúmulo de dudas que hacían presagiar que el #MLSisBack estaba en peligro.
Finalmente, tras 51 partidos y 34 días, ese mar de dudas se terminó por despejar, haciendo gala del excelso trabajo que ha realizado la Major League Soccer. Tanto que el 'Guiness World Records' les premió por hacer un torneo tan rápido, tan grande y en un espacio tan reducido con tal éxito. Ahora, sin apenas una fecha de descanso, se reinicia la auténtica MLS con su "nueva" y remodelada temporada regular mediante, justamente, las dos franquicias afectadas por el coronavirus: FC Dallas y Nashville SC. ¿El objetivo? El 12 de diciembre, día en el que está fijada la final por la MLS Cup en su 25ª edición.