Rakitic, el señalado
El croata es el único futbolista, de los titulares ante el Nápoles, que caerá seguro del equipo. El regreso de Sergio Busquets y su decepcionante último partido le apean ante el Bayern.
Quique Setién tiene totalmente diseñado el once que alineará este viernes ante el Bayern de Munich en los cuartos de final de la Champions. De hecho, apenas habrá unos retoques respecto al equipo que salió ante el Nápoles. En la portería seguirá Ter Stegen, en defensa se mantendrá la línea de cuatro -Semedo y Alba, en los laterales, y Piqué y Lenglet, como centrales- y en ataque se mantendrá el tridente formado por Luis Suárez, Griezmann y Messi.
Los únicos cambios serán en el mediocampo. El regreso de Sergio Busquets y Arturo Vidal, tras cumplir su partido de sanción, abren las puertas a más variantes en la pizarra del técnico cántabro de cara a la cita ante los alemanes.
Pero si unos entran, otros han de salir. Setién ya ha decidido la primera carta que sacrificará; Ivan Rakitic. El croata no estará en el once que salte en Lisboa. Su partido ante el Nápoles dejó muchas dudas en el cuerpo técnico. No sólo tuvo problemas para sostener el pivote defensivo, con numerosos errores en la circulación de balón, sino que provocó un penalty absurdo cuando peor lo estaba pasando el equipo italiano, abriéndole las puertas a soñar todavía con la remontada.
Será Sergio Busquets quien ocupe la plaza de pivote defensivo, acompañándole en la medular el holandés Frenkie de Jong, que cuajó un partido sobresaliente, pese al incidente que sufrió un día antes, al recibir la picadura de una abeja que le dejó la mano derecha inflamada, teniendo que jugar con un vendaje.
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La única duda que se le presenta a día de hoy a Setién es quién acompañará en el mediocampo a Busquets y De Jong. El pulso se dirime entre Sergi Roberto y Arturo Vidal -Riqui Puig, pese a su enorme talento, aún no tiene galones, mientras que Arthur ni está ni se le espera-.
El de Reus completó un gran partido ante los italianos, sobre todo a nivel de sacrificio y entrega, un ponderable incontestable que el técnico cántabro está valorando a la hora de tomar la decisión definitiva, pero el internacional chileno se desenvuelve como pez en el agua en las grandes citas, y tanto su experiencia como garra son vitales para dar un 'plus' al equipo. Además, desde la llegada de Setién al banquillo, Vidal se ha convertido en una pieza indiscutible en el once, con 14 titularidades en 24 partidos, con el dato añadido de que ha estado siempre en todas las citas importantes de la temporada, a excepción del partido ante el Nápoles, por sanción. Así pues, todo apunta que será Vidal quien acabe ganando la partida y complete el once que salte este viernes ante el Bayern.