Cubillas acaba con el sueño de la Peña y se cuela en la final
El Castellón se impone con un gol en el 111'. El cuadro balear terminó con 9, se quejó enérgicamente de las expulsiones y aguantó muchos minutos en inferioridad.
Reconocimiento eterno a la Peña Deportiva, desde ayer en el corazón de muchos que adoran los sueños humildes. El cuadro balear puso contra las cuerdas a un gigante como el Castellón, que tuvo que recurrir a Cubillas, uno de sus talismanes, para quedarse de nuevo a un paso de Segunda. La Peña terminó con nueve jugadores. Disputó más de 40 minutos con dos menos, tras dos expulsiones muy rigurosas, y forzó una prórroga cuando los penaltis amenazaban una suerte que ya le privó al Castellón del ascenso directo ante el Logroñés. Pero apareció Cubillas para meter un gol de oro y espantar los fantasmas.
La primera parte fue una toma de contacto, pero ya se notó que el Castellón tenía más mordiente. No encontró el gol porque desde el inicio estuvo fallón a la hora de definir. El primer aviso serio lo dio César Díaz, en su estreno en el remate. Rubén Díez también lo intentó con un disparo lejano. La Peña se sentía cómoda, pero en diez minutos se le puso el partido cuesta arriba con la expulsión de Cruz. El lateral se fue al vestuario antes del descanso de forma rigurosa y sin entenderlo. César cerró la primera parte con otro remate de cabeza que pasó rozando el palo.
La ocasión del punta del Castellón fue un aviso del asedio en el que se convirtió el inicio de la segunda parte. César Díez tuvo hasta cuatro ocasiones en diez minutos, con un gol anulado por fuera de juego incluido. Satrústegui y Ortuño también lo intentaron. La Peña resistía de forma heroica, pero no contaba con la expulsión de De Val, también muy rigurosa. Con nueve, el equipo balear tiró de épica y supo defenderse hasta el punto de desquiciar en más de una ocasión a un Castellón que fue perdiendo gas conforme agonizaba el duelo.
El primer capítulo de la prórroga fue de Alcaina y de Torres. El punta empezó a convertir al meta de la Peña en uno de los héroes de la noche tras realizar dos buenas paradas cuando el balón estaba casi dentro. El Castellón apretó para intentar evitar la lotería de los penaltis. Le puso ganas y fe, pero no pudo con el corazón balear hasta que la cabeza de Cubillas apareció para acabar con uno de los sueños más bonitos que se recuerdan en un playoff. La Peña dice adiós y el Castellón vuelve a estar a un paso del fútbol profesional.