Kiko Olivas estará ocho meses de baja por la lesión de la rodilla
El central tuvo que retirarse en la primera parte del duelo ante el Eibar y las pruebas diagnósticas indicaron graves daños en su rodilla.
La peor noticia para el Real Valladolid, una vez salvado, en Eibar no fue la derrota (3-1) en Ipurua, sino la lesión de Kiko Olivas. Si ayer había preocupación en la expedición blanquivioleta después de que tuviera que retirarse en el primer tiempo, el resultado de las pruebas diagnósticas no puede ser más desalentador, ya que deja al jugador fuera de los terrenos de juego durante ocho meses.
El central blanquivioleta sufre una rotura en el ligamento cruzado anterior, lesión en el cuerpo menisco externo, esguince de grado 1 en el ligamento colateral lateral y un edema óseo en el cóndilo femoral externo, lo que le obligará a estar de baja entre siete y ocho meses de baja para recuperarse, por lo que el fútbol se acabó para el central andaluz en 2020.