Un pulso entre dos aguas
El Alavés se la juega: una victoria le entrega la permanencia sin mirar a San Mamés y Son Moix. El Betis quiere decorar su final de campaña.
Ni Betis ni Alavés pretendían llegar así a este tramo final de Liga. Los verdiblancos soñaban con una lucha por Europa que se convirtió en utópica y los albiazules querían cerrar su permanencia mucho antes para no encarar estas dos jornadas con el miedo en el cuerpo. Para evitar el caos total aterrizó en el conjunto vitoriano Juan Ramón López Muñiz, que de momento no frena una mala racha que refleja una sola victoria en las once últimas jornadas de Liga pese a que su equipo sí expuso esbozos de mejoría ante Real Madrid y Getafe. Un triunfo le entregaría la salvación matemática al cuadro vasco sin mirar al Mallorca y al Leganés mientras el Betis mira más al futuro que al presente tras anunciar la llegada de Pellegrini y deambular entre la nada de la clasificación después de firmar su salvación (sigue el partido en directo en As.com).
Muñiz pidió más presión e intensidad física a los suyos para sostener definitivamente la permanencia. Quizás lo mismo que le hará falta al Betis para que su cita de hoy no se parezca a un trámite aunque lo sea. Con Alexis a los mandos del equipo, el triunfo ante Osasuna apagó algunos fuegos mientras otros tratan de ser minimizados con la llegada de Pellegrini. Difícil papel el de los verdiblancos desde la vuelta del confinamiento tras convertir su ambicioso proyecto en un salvado coqueteo con la zona de peligro.
La imagen del Betis ante el Atlético puede hacer que Alexis renueve su confianza en muchos de sus titulares del sábado, pero piezas como Emerson y Pedraza aspiran a volver a un once que necesita refrescarse. Muñiz tiene varios lesionados y problemas en su lateral derecho con la sanción de Aguirregabiria. O recicla a un central como Tachi o jugará Aleix Vidal en uno de sus últimos servicios al club. El entrenador asturiano irá con todo: confiará en su dupla de ataque (Joselu-Lucas Pérez / 21 goles) para agarrar la salvación sin mirar a los demás. Aunque esto último parezca casi inevitable. Incluso perdiendo, si lo hacen también Mallorca y Leganés el objetivo estará en manos de Muñiz, que de momento sigue entre dos aguas.