Una bendición en propia meta para un Mourinho bajo mínimos
El Tottenham sumó su segunda victoria en los últimos diez partidos y todavía aspira a colarse en puestos europeos. El Everton inquietó poco a Lloris.
Brazos caídos, sin prácticamente objetivos más allá del orgullo de terminar por encima del Arsenal y con la sensación de que el cambio de ciclo, si la chequera lo permite, es imperativo en el Nuevo White Hart Lane. Mucho cascarón, mucho nombre en las camisetas y en el banquillo, pero a la hora de la verdad poca chicha en este Tottenham, que hoy sumó su segunda victoria en los últimos diez partidos con un tanto en propia meta del Everton de Ancelotti, que comanda el siempre ambicioso y decepcionante proyecto toffee.
Es cierto que el regreso de Kane le ha lavado un poco la cara a los spurs, pero también que los cuatro puntos que separan a los londinenses de la sexta plaza que defiende el Wolves parecen un mundo teniendo en cuenta el nivel del equipo del portugués. Y, sin embargo, tampoco se puede decir que fueran peores, porque el Everton apenas inquietó el marco de Lloris, solo que, con tan poco, no le da para objetivos mayores. Sería la primera vez que el Tottenham se queda fuera de los seis primeros desde 2009, un batacazo para un club que el año pasado hizo historia colándose en la primera final de Champions de su historia.
La sensación, resumida por el ex delantero de la Premier League Chris Sutton, es que fueron “dos equipos mediocres de mitad de la tabla”, algo que queda más patente aún cuando los estadios no están virtualizados por la televisión. Qué vacío queda el silencio cuando el fútbol no consigue llenarlo. Control del Tottenham durante casi todo el partido, sí, sobre todo hasta el momento en que Lo Celso envió un disparo al pecho de Keane que este desvió a gol, y poco más. Muy poco más. Alguna arrancada de Son que terminó en disparo bien blocado por Pickford y, sobre todo, un gran partido de Winks en la medular, pero lecturas muy preocupantes para el equipo de Mourinho, que deberá justificar el fracaso de los suyos en la pandemia y las lesiones previas de los suyos.