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ALAVÉS 0 - GRANADA 2

Soldado mete al Granada en la pomada por jugar en Europa

El equipo nazarí acertó en las áreas (0-2) ante un Alavés que desperdició sus ocasiones y sigue sin sellar la permanencia.

El Alavés buscaba rubricar ya la salvación en Primera y el Granada apurar sus opciones de la séptima plaza cada vez más complicada con Europa esfumándose, pero dio un golpe en la mesa para aspirar al bombo continental con dos tantos de Antoñín y Soldado en Mendizorroza. Los hombres de Asier Garitano merecieron mayor botín por insistencia.

Un Granada que sigue empeñado en ser la revelación de la Primera División aguantando el tipo con la zona noble con uno de los presupuestos más modestos. El venezolano Herrera intentaba poner orden en un arranque sin dueño, con el Alavés filtrando balones a Lucas Pérez y Joselu Mato, con movimientos rápidos y Camarasa de lanzador. Un Granada bajo la batuta de Diego Martínez que se desdoblaba con un 5-4-1 defendiendo que variaba de dibujo en ataque con carrileros profundos como Foulquier. El francés las tuvo tiesas con Luis Rioja por su banda, que remató en la primera jugada de ataque a los 23 minutos que, en segunda instancia, mandaba alto Herrera. Soldado navegaba solo ante la zaga babazorra, que no se andaba con contemplaciones.

En esas que Soldado rebañaba un balón que cedía a Puertas, se iba por piernas, remataba solo, paraba Roberto y en el rebote, Antoñín Cortés, en tres toques y con suspense, remachaba su primer gol en la Liga. Un 0-1 que obligaba al equipo de Asier Garitano a estirarse. De inmediato, Magallán erraba solo delante del arco al saque de una falta como si despejara en su función de central. Incomprensible. Lucas Pérez mandaba a la madera la segunda ocasión clara de los locales tras pase de espuela de su socio Joselu Mato, en un remate acrobático metiendo el cuerpo ante Antoñín. El Alavés buscaba con ahínco el empate y el propio Joselu remataba contra un contrario en el área pequeña y de cabeza a saque de Lucas de un balón parado en una primera mitad espesa, salvo estos latigazos ofensivos que sacaron del sopor el choque.

El segundo acto empezó con Soldado lastimado en un tobillo por culpa de Duarte y raudo marcando el segundo tanto de la tarde de un disparo con el interior desde la frontal ejecutado con sutileza a pase de Machín, recién incorporado. Quedaba un mundo, pero al equipo nazarí le salía todo y se le ponía todo a favor de obra.

Burke, nada más saltar se fue por velocidad para lanzar un latigazo que obligó a emplearse a fondo Aarón para despejar. En la portería contraria Machín, en galopada personal casi sentenciaba el envite en el 67'. El partido estaba ya roto a esas alturas, con el Granada gustándose espoleado por el resultado. Laguardia reclamó penalti en un atropello en el área en una jugada de ataque babazorro, pero sin consecuencias. El tiempo se consumía con los alaveses peleando, pero resignados y el equipo andaluz contemporizando. Hasta tuvo tiempo de debutar en la máxima categoría el centrocampista del filial nazarí Mario Rodríguez, en el minuto 88.

Diego Martínez

El entrenador del Granada, Diego Martínez, reconoció sonriente que consiguieron el sueño que tenían al inicio de la temporada, la permanencia y comentó que "es un día de gran felicidad para todos" tras superar por 0-2 al Alavés.

El técnico nazarí subrayó en la rueda de prensa telemática al finalizar el partido, que su equipo compitió "con compromiso e ilusión" y agradeció a los jugadores cómo lo hicieron, al tiempo que extendió sus buenas palabras al club en general y a la afición.

Subrayó que consiguieron competir "con uno de los presupuestos más bajos de la categoría" y describió que el vestuario lo celebró "por todo lo alto". "Hemos logrado un récord de puntos y me siento muy orgulloso de nuestra trayectoria global de la temporada", dijo Diego Martínez, satisfecho, sobre todo con el segundo gol, de Roberto Soldado, porque es un tanto que a su juicio les define bien, ya que tuvo "solidaridad para recuperar y mover el balón de un lado a otro".

Puso en valor que "en Mendizorroza y ante el Alavés hay que hacer muchas cosas bien" para ganar y definió a su equipo con un conjunto "camaleónico". "Hemos jugado partidos muy diferentes y nos hemos intentado adaptar a las circunstancias", insistió Diego Martínez que recordó que "el Granada estaba en las quinielas para el descenso a principio de temporada" y le han dado la vuelta a eso.

No ocultó su alegría por volver a mantener la portería a cero y por esos jugadores que han vuelto a mostrar una identidad reconocible. "Ni fue horrible el partido del otro día ni hoy ha sido extraordinario", aclaró.

Sobre el futuro no se fijó objetivos y se marcó "sumar todos los puntos posibles" y ver donde les lleva eso al final de la competición. "Tenemos máximas ganas de dar alegrías y máxima humildad", concluyó.

Garitano

El entrenador del Deportivo Alavés, Asier Garitano, explicó tras la derrota de su equipo ante el Granada que tienen que darle "dos vueltas más de tuerca a todas las situaciones" y subrayó que como hay pocos días de recuperación, "el estado anímico influye muchísimo".

El técnico explicó en rueda de prensa que necesitan hacer más de lo que están haciendo y apuntó que tienen que ser "más agresivos en las disputas, en segundas jugadas y en la salida de balón".

"El rival te genera mucho con poco porque esta en otra dinámica y cuando no haces gol con ocasiones claras, eso te va mermando", consideró el técnico babazorro, que mostró su preocupación tras sumar la cuarta derrota consecutiva.

"El vestuario está muy tocado, pero tenemos que mirar al próximo partido porque no hay tiempo como había en la temporada normal y la dificultad es mayor", manifestó el preparador del Glorioso, consciente que deberá "ayudar y convencer" a sus jugadores que dependen de ellos mismos para alcanzar la salvación.

Reconoció que durante los partidos han creado ocasiones en ataque y analizó que deben mejorar en "dificultar las cosas a los rivales y ser más solventes en otras situaciones para generar más". "Cuando encadenas derrotas se suele mirar al de al lado y hay que mirarse uno mismo", recomendó el de Bergara, que echó de menos que su equipo sea "mejor en las situaciones sin balón". "Cada uno tiene que hablar poco y hacer mucho", insistió el entrenador alavesista.

Preguntado por la respuesta del equipo cuando recibe un gol, Garitano dijo que sólo el Granada logró remontar un partido en este tramo final después del parón, lo que demuestra que "a todos los equipos les cuesta sacar los partidos".