Masip detuvo ante el Celta su quinto penalti como blanquivioleta
El cancerbero del Real Valladolid evitó el gol desde los 11 metros por primera vez este curso, por las tres del anterior y una Segunda.
Jordi Masip volvió a ser el héroe del Real Valladolid contra el Real Club Celta, permitiendo que su equipo sumara un punto que mantiene a raya a los vigueses, al Eibar y al Espanyol y que amplía las distancias con Mallorca y Leganés. Lo hizo con varias paradas decisivas y con una sobre todo, con el penalti que intentó transformar Iago Aspas, sin éxito, algo que no es nuevo.
Lejos de ser la primera vez que sucedía, fue la quinta vez que lo hizo desde que es blanquivioleta y la séptima en su carrera, ya que antes, en el Barcelona B, detuvo dos penas máximas en la Segunda División. La novedad en esta ocasión es que nunca antes lo había hecho en Zorrilla, pues las otras cuatro fueron a domicilio, y en otras tres puntuó el Pucela.
"Hay un trabajo previo en el que entre todos intentamos llegar a un consenso de por dónde pueden tirarlo los lanzadores", explicó el catalán este jueves en rueda de prensa telemática, circunstancia que volvió a jugar a su favor, al contrario de lo sucedido en Leganés, donde acertó con el sitio pero no lo pudo parar. Antes, contra el Sevilla, en el 0-1 de Zorrilla, llegó a hacerlo en la primera ejecución de Banega, pero en la repetición decretada por el VAR hubo gol.
Por tanto, contra el Celta fue decisivo primera vez esta temporada en este arte, después de encajar en los ocho duelos restantes frente a los ejecutores. Y la sensación de hacerlo en Primera no fue nueva, porque la pasada campaña se impuso a Messi, a Rodrigo y a Gerard Moreno, lo que no sirvió para puntuar contra el Barcelona, pero sí para empatar contra el Valencia y ganar al Villarreal. En su primer año como blanquivioleta, mientras tanto, se impuso a Rodri en el loco 4-4 contra la Cultural Leonesa, acción con la que abrió la veda de una senda poco habitual y meritoria, como lo fue su última actuación.