Rodrygo, año uno
El brasileño firmó con el Real Madrid el 18 de junio de 2019. Un año que fue una montaña rusa: del Castilla al hat-trick al Galatasaray. Más musculado, ahora aspira a estrenarse con la Liga...
Rodrygo Goes sopla este 18 de junio su primera vela como madridista. Hace justo un año era presentado en el Santiago Bernabéu después de que el Real Madrid pagara por él 40 millones de euros al Santos para sumar otra joya a su brasileñización con jóvenes talentos de la verdeamarelha. Con 18 años, Rodrygo se comprometía por seis más con la entidad de Chamartín. Su primer aniversario juntos ha tenido de todo: un inicio tímido teniendo que adaptarse en el Castilla de Raúl, una irrupción cuando le llamó Zidane casi nuclear, desintegrando récords en la historia blanca, el paso a un segundo plano en las semanas previas a la pandemia del Covid-19 y un 'nuevo' Rodrygo en la vuelta al fútbol. Contra el Eibar fue titular junto en un tridente junto a Hazard y Benzema. Ha vuelto con trazas de ser de nuevo importante en la rotación zidanesca...
De récord en récord
Poco le duraron las cabalgadas en el Di Stéfano, al que volvió el pasado domingo pero con el primer equipo. Zidane le dio la oportunidad el 25 de septiembre del año pasado y sólo tardó 95 segundos en hacer su primer gol como madrididista. El debutante más rápido en marcar para el Real Madrid en la historia de la Liga. También pasó a ser el tercer extranjero más precoz en ver puerta en la competición liguera: Varane (18 años y 152 días), Vinícius (18 años y 206 días) y Rodrygo (18 años y 260 días). "Agradezco al míster la confianza", se limitó a decir Rodrygo, más comedido ante los micrófonos que con la pelota. Pero fue su explosiva carta de presentación.
El 6 de noviembre llegó otro golpe en la mesa más fuerte. Ahí, toda Europa pasó a fijarse en él. Le hizo un hat-trick en Champions al Galatasaray y se convirtió en el más joven en lograr el hat-trick perfecto (gol con la derecha, con la izquierda y de cabeza). Lo consiguió con 18 años y 301 días. Fue el segundo más precoz en lograr tres goles en la máxima competición continental, sólo superado por un icono y el hombre que le ha dirigido en el filial blanco: Raúl.
Pero llegarían tramos más complicados sin poder rascar minutos (no fue ni convocado a los tres primeros partidos de febrero) y la decisión de Zidane y del club de que bajase temporalmente de nuevo al Castilla. Ahí volvió a destrozar rivales (su golazo al Sanse lo consiguió en un arrancada desde campo propio) y algún desliz propio de la edad que le ha servido para aprender. En esas estaba cuando sobrevino el coronavirus y lo cambió todo.
Un 'nuevo' Rodrygo
Rodrygo mantiene su estabilidad familiar, sus padres y su hermana pequeña viven con él en su casa en Madrid, y no pierde la paciencia. El parón por el Covid-19 lo empleó en prepararse para sorprender a Zidane a su regreso. Según pudo saber AS, la perla madridista siguió en el gimnasio que tiene instalado en su casa un plan intenso con el que ha ganado cerca de tres kilos de músculo. Los lució ante el Eibar, especialmente en el tren inferior, más musculado. Rodrygo avanza para convertirse en jugador inamovible del primer equipo también la próxima temporada. Lo hace como el actual tercer máximo goleador del equipo (siete dianas), ganando galardones por delante de otros talentos como Ansu Fati y siendo además el que más valor de mercado tiene en el actual plantel. Pero mientras, en esta, aspira a cerrar su primer año de blanco remontando y levantando la Liga. Y quién sabe si algo más.