Kroos pasa al ataque
El alemán ha pasado de un solitario gol el curso pasado a seis en este, su récord en el Real Madrid. Zidane le está animando a chutar y el 8 madridista lo hace más nunca...
“¡Golaso!”. El grito de Marcelo cuando Toni Kroos clavó el 1-0 por la escuadra del Eibar, cosas de los micrófonos de ambiente en este nuevo fútbol a puerta cerrada, fue más expresivo incluso que la celebración del alemán. Kroos había marcado su sexto gol de la temporada con el Madrid, récord del teutón con la camiseta madridista en una temporada. La alegría de Marcelo reflejó algo que ya no es sorpresa: el 8 alemán se ha lanzado a ver portería rival...
Es una de las consignas que le ha venido transmitiendo Zidane desde que la pasada temporada Kroos fuera uno de los señalados por la afición en su peor año en el equipo blanco. El marsellés le ha pedido al metrónomo germano que chute, que busque más los tres palos... Kroos lo está haciendo. Esta temporada ha chutado 51 veces (8,5 intentos por cada gol conseguido) y basta con acudir a su estadística de la campaña pasada para entender el cambio de chip: en la 2018-19, Kroos sólo disparó 34 veces (con un solitario gol). Esa cifra estaba en su promedio de remates por temporada en el Madrid (35) pero palidece ante este Kroos más chutador al que aún le quedan diez jornadas más el Etihad en Champions (como mínimo) para seguir animándose a encontrar el fondo de la red contraria.
A la caza de su récord muniqués
Con los prismáticos se observa a sí mismo, porque su plusmarca en un año fue en el Bayern 2012-13 (nueve dianas) cuando era más habitual verle merodear área enemiga. En aquella campaña, la por entonces joven perla alemana jugaba de diez en el sistema de Jupp Heynckes. Este Kroos de 30 años y que ha prometido fidelidad al Madrid (como informó AS en su mente está cumplir íntegro su contrato, al menos hasta 2023) se sacó ese golazo en la reanudación liguera contra el Eibar que entierra, como si perteneciera a una vida pasada, la polémica del penúltimo partido. En el Villamarín, Kroos fue sustituido en el 69’ (con 1-1) y se fue con rostro gélido al banquillo. Venía de aquella suplencia ante el City y el cambio al descanso en el derbi. Pero es cosa del pasado. Los goles siempre son curativos.